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ANEP no restituye a director del IAVA y estudiantes llamaron a un "abrazo" al liceo
La Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) decidió desplazar de oficina al director sumariado del liceo IAVA, Leonardo Ruidiaz, hasta que finalice el sumario en su contra por el conflicto entre Secundaria y el gremio estudiantil del centro educativo.
Varios dirigentes de la Federación Nacional de Profesores de Educación Secundaria (Fenapes) compartieron una resolución de la ANEP que marca que Ruidiaz pasará al Departamento de Documentación Estudiantil "hasta la finalización del sumario que se encuentra en curso".
Según el documento, dictado a finales de setiembre, este movimiento se debe a que la vuelta al cargo de Ruidiaz, que debía ocurrir en los próximos días al cumplirse seis meses de su separación preventiva del cargo a principios de abril, podría "afectar la investigación" sobre su accionar.
Debido a esta decisión de la ANEP, el núcleo sindical del IAVA llamó a un "abrazo colectivo" al liceo el próximo miércoles 11 de octubre a las 18:30.
Según la organización, la división Jurídica de la Administración "no encontró ningún motivo" para sancionar a Ruidiaz, pero no le devolvió el cargo porque "hay una investigación en curso a 10 docentes que él podría obstaculizar".
Javier Iglesias, dirigente de la Asociación de Docentes de Educación Secundaria (ADES), dijo a El Observador que el gremio apoyará la movilización del núcleo del IAVA, para lo que decretó un paro parcial en Montevideo de 16:00 a 21:00 el próximo miércoles. Agregó que la filial de San José también se sumará a la medida.
"Es una muestra más de autoritarismo y despotismo. No hay razón jurídica para que el director no se reintegre", criticó Iglesias.
El núcleo del IAVA agregó que las autoridades comunicaron que los estudiantes "no tendrán más un salón gremial", luego de remodelar el lugar que utilizaba el gremio estudiantil para instalar un acceso al IAVA, punto inicial del conflicto entre Secundaria y los alumnos.
En un principio, se comunicó a los estudiantes que se iba a instalar una rampa en ese lugar, pero los estudiantes se negaron a entregar el salón ya que indicaron que el centro ya tenía una rampa de accesibilidad y un ascensor que conecta a todos sus pisos. Finalmente se pintó la fachada del salón y se instaló una escalera.
