Bergara defendió transparencia de la ley de inclusión financiera

Seguir aferrados al efectivo y al cheque es seguir aferrados a un mundo caro, ineficiente, opaco e inseguro; ir hacia un sistema de pagos con medios electrónicos es ir hacia un mundo más eficiente, menos costoso, más seguro y más transparente. Y nosotros estamos a favor del bien y en contra del mal", dijo este miércoles el presidente del Banco Central (BCU), Mario Bergara, en defensa del proceso de inclusión financiera que el gobierno lleva adelante desde 2014.

Entre otros argumentos para esa defensa señaló que hace tres años los pagos a través de medios electrónicos llegaban al 9% del total y en la actualidad se ubican en el entorno del 30%, y que hay en el país 52 mil POS cuando eran 10 mil en la misma comparación.

"No hay duda que hay que ir hacia un esquema de medios electrónicos", señaló Bergara en un almuerzo organizado por la Asociación de Dirigentes de Marketing (ADM). "Inclusión financiera mediante, los pagos con tarjeta de débito se multiplicaron diez veces en tres años, mientras los cheques están cayendo significativamente. Cosas que antes se cobraban ahora no se cobran, aranceles de tarjetas que bajan, todo eso es parte del proceso de inclusión financiera", sostuvo.

Con esas referencias, Bergara salió al cruce de la intención de la oposición y un grupo de empresarios de juntar firmar para un plebiscito contra la ley de inclusión financiera e incluir en la Constitución que los pagos por medios electrónicos sean voluntarios.

"La inclusión financiera está siendo recibida saludablemente; nos coloca en proa hacia un mundo moderno y no arcaico", afirmó Bergara.

El presidente Tabaré Vázquez también defendió este miércoles a la normativa. "Se habla de que es obligatoria y no es así. Se habla de que es muy rígida, de que el gobierno fue muy rígido al implementarla, pero hubo una cantidad de prórrogas solicitadas por los comerciantes", dijo el mandatario. Sobre el plebiscito promovido fue tajante: "No voy a firmar, porque estoy convencido de que es una buena ley".

Dentro de ese escenario moderno, Bergara hizo referencia a las monedas digitales. "Tener billetes en el celular con el número de serie, registrados, monedas digitales que sustituyan el billete físico. A ese mundo vamos", dijo.

"La gente aferrada al pasado y al billete físico va a quedar de lado en ese mundo. Hay que resolver aspectos operativos, de seguridad lógica, pero esa realidad está a la vuelta de la esquina", marcó.

Sobre esa base entonces, indicó el BCU no está ajeno a ese proceso de modernización y anunció que este año el banco explorará la posibilidad de tener billetes emitidos de manera digital a través de una prueba piloto. "En un bolsillo estará la billetera, en el otro el celular", ejemplificó.

Otra herramienta que cada vez cobra más fuerza en el mundo son las fintech (plataformas tecnológicas para la actividad financiera). La llegada de esos dispositivos –varios de ellos ya operativos en Uruguay– generan desafíos y posibilidades para el presidente del BCU. "Son un elemento de disrrupción drástica del sistema o un proceso de evolución. Hay que entender bien qué es lo que hace cada plataforma", indicó. Y con ese diagnóstico, decidir qué es lo que se debe regular y permitir o no. "Algunas bellezas que pueden tener (las fintech), como reducir los costos de transacción o facilitar el acceso a servicios financieros, tienen como contrapartida riesgos, como por ejemplo, el de lavado de activos", alertó. Esa posibilidad marca otro punto de atención para los bancos centrales y los reguladores financieros, dijo Bergara.

Con la recurrente analogía de los "platitos chinos" es como describe Bergara el rol del gobierno para atender varios frentes de la economía al mismo tiempo.

La intención es que los "platitos chinos" giren todos a la vez y en forma ininterrumpida. Para Bergara, ellos son la estabilidad de los precios (inflación dentro del rango meta establecido por el BCU), la estabilidad financiera, las cuentas públicas y la competitividad de las empresas.

"Los platitos chinos no todos giran siempre al mismo ritmo. La situación actual es que tenemos estabilidad de precios y financiera, esos platitos están girando bien", expuso Bergara. Sin embargo, hay "un poco más de preocupación en las cuentas públicas y la competitividad. El platito que gira menos es el de las cuentas públicas", añadió. Por eso, para el jerarca todas las decisiones que se adopten "tienen que ser consistentes con una reducción del déficit fiscal". Y allí, será "imprescindible una adecuación, una corrección en el terreno fiscal que consolide la credibilidad que Uruguay tiene dentro y fuera del país", manifestó.