El Sindicato de Transporte de Carga (Sutcra), realizó este lunes un bloqueo en el ingreso a la planta de La Tablada de ANCAP –la principal distribuidora de combustible del país– que impidió el ingreso de los camiones. La medida hizo que durante toda la jornada no se despechara el combustible que luego se comercializa en las estaciones de servicio de Montevideo y el sur del país.
Los lunes se cargan habitualmente entre 5 y 6 millones de litros y es uno de los días en que se reabastece a las estaciones luego del fin de semana. Desde la Unión de Vendedores de Nafta del Uruguay (Unvenu) se informó a El Observador que hasta el momento no hubo problemas con el stock en la mayoría de las estaciones.
En diálogo con El Observador, el dirigente de la Unión de Transportistas de Combustible (UTC), Oscar Benavídez, expresó de retomarse la carga el martes no habrá problemas.
Eso es una incógnita porque el Sutcra tiene previsto realizar asambleas sorpresivas toda la semana en diferentes sectores de la producción donde los camioneros cumplen actividades.
Recién a primera hora del martes el sindicato decidirá en qué lugar se moviliza. En otras oportunidades, por ejemplo, se interrumpió el tránsito en la zona portuaria.
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Los reclamos del sindicato giran sobre el salario, la seguridad y la alimentación.
El gremio denuncia que hay choferes que conducen días enteros sin descansar para poder cobrar más a fin de mes. “Lo que pasa es que las empresas pagan de manera irregular. Se cobra en función de un promedio de combustible trasladado, lo que exige trabajar a una velocidad rápida. A fin de mes, entonces, conseguís una liquidación mejor”, explicó el secretario general del Sutcra, Ricardo Aloy a modo de ejemplo.
El salario de los conductores es “complicado” de calcular, dijo Aloy a El Observador, porque la manera de pagar es alternativa y no formal. El dirigente adelantó que el promedio ronda los $ 17.000 mensuales. “Por ejemplo, hay trabajadores que deberían percibir un salario cuatro veces mayor a lo que en verdad se les paga”, puntualizó.
También se pide mejorar los viáticos que las empresas destinan para que los choferes se alimenten en una jornada de 24 horas que hoy es de $ 217. “Te dan $ 217 para que gastes en un día entero de trabajo. Eso solo te da para un refuerzo de mortadela y una agua grande. O sea que estás todo un día sin dormir y mal comido”, apuntó el dirigente.
Según dijo Aloy, el gobierno no fiscaliza que el pago de los salarios se realice de manera formal ni tampoco ubica dispositivos de controles en las rutas para corroborar cuánto ha descansado un conductor o cuántas horas ha manejado en un día.
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