Juan Samuelle

China también se lleva casi toda la carne ovina que Uruguay exporta

Octubre fue un mes récord para las ventas de carne ovina a China, en volumen y precio; el cordero pesado se consolida arriba de US$ 4 por kilo y –como en los vacunos– hay claros estímulos para producir más

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21 de noviembre de 2019 a las 05:01

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En un año, China aceleró el comercio de carne ovina. Pasó a comprar casi la mitad del volumen exportado por Uruguay, desplazando a Brasil –comprador histórico de ese producto– que ha enlentecido sus compras por cuestiones burocráticas. El gigante asiático aparece una vez más como una gran oportunidad.

El precio del cordero pesado lleva 15 semanas consecutivas de suba y alcanzó los US$ 4,09 por kilo en cuarta balanza, el mayor valor desde marzo de 2015 según la referencia de la Asociación de Consignatarios de Ganado (ACG) de la semana cerrada el sábado 16 de noviembre.

El surgimiento de China como un importante comprador –que demanda todo tipo de carcasas incluyendo las pesadas, anteriormente más difíciles de colocar– llevó a un aumento en el precio de los capones mayor aún que el del cordero, y así alcanzaron los US$ 4 por kilo en cuarta balanza por primera vez en siete años y medio.

Así, el diferencial de precios con el cordero es de apenas dos centavos o 1%, el menor en ocho años. Un año atrás, el cordero cotizaba a US$ 3,40 por kilo, de modo que acumula una suba de 20% en dólares.

Mientras, en el caso del capón el precio por kilo de carcasa un año atrás era de US$ 3,14 –en este caso, una suba de 27%–.

 

 

En consecuencia, la faena de capones de octubre (20.273 cabezas) fue la mayor en seis años y casi el doble que los faenados en igual mes del año pasado.

La disponibilidad de lanares es escasa y los productores retienen vientres.

La faena de ovinos en los primeros 10 meses del año fue de 573.310 cabezas, un descenso de 16,5% respecto al mismo período de 2018. La caída la lideran las ovejas, con un descenso de 22% en lo que va del año, a 141.539 cabezas seguidas de los corderos que bajan 17% a 307.033 cabezas.

Esa retención por ahora genera una recuperación muy tímida de la población ovejera. El stock ovino al 30 de junio de 2019 fue 6,42 millones de animales, con un aumento en el año de 85.000 cabezas (1%). La población actual es cuatro veces menos que los 25 millones alcanzados en 1990.

Con un porcentaje de preñez de 92%, dos puntos porcentuales por encima que el de 2018 de acuerdo al relevamiento que coordina el Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA), en 2020 puede darse un segundo aumento leve de la majada.

Las exportaciones de carne ovina a China en octubre fueron las mayores de la historia para ese mercado, 1.430 toneladas peso canal, el doble que las 702 toneladas exportadas en el mismo mes del año pasado, con un 72% de participación en el total exportado, también la mayor proporción de la historia.

Como en la carne vacuna, los compradores chinos llevan todo lo que pueden. La parrilla de fin de año no será barata.

 

 

 

 

La facturación por ventas de carne ovina a China fue histórica en octubre, con US$ 6,4 millones, dos veces y media más que en el mismo mes del año pasado.

China apareció como mercado para la carne ovina en 2007, con compras por apenas 295 toneladas peso canal. A partir de ahí comenzó un crecimiento ininterrumpido que alcanzó un máximo de 8.416 toneladas en 2013 –con una participación de 35%–, descendiendo en los siguientes dos años y recuperándose de 2016 a la actualidad.

En 2018 se exportaron 4.433 toneladas (30% de participación) y en 2019 se alcanzarían las 6.700 toneladas, pero con una participación mayor, de aproximadamente 50%.

Brasil, anteriormente el principal comprador, queda segundo y su participación en las ventas de Uruguay baja del 51% al 33%, según las estadísticas del Instituto Nacional de Carnes (INAC).

Brasil perdió el liderazgo en las importaciones en febrero, en parte también por un atraso en las autorizaciones de las licencias para exportar, vinculado a cambios en la operativa de control del país importador y por la depreciación del real que lleva varias semanas en baja y cotiza en el eje de los 4,20 por dólar esta semana. 

Pero lo principal es que China paga más. Y esto tal vez persista por bastante tiempo. “Con la irrupción de China hay un cambio muy importante en el mercado de carne ovina y no es momentáneo. Mis socios de JBS dicen que durará al menos cinco años más”, explicó el broker de carnes Jorge Dimu al programa Tiempo de Cambio de radio Rural.

El precio promedio de la tonelada exportada de la carne ovina a China en lo que va del año promedia US$ 4.346, es decir US$ 730 o 20% más que los US$ 3.616 del mismo período del año pasado.

China lleva muchas veces la carcasa entera, lo que simplifica la operativa.

“A China se venden mayormente carcasas de animales adultos, mientras que a Brasil se venden corderos pesados de excelente calidad y compra todos los cortes: french rack (corte más caro), T-bone, asado de cordero especial, piernas con hueso y paletas especiales”, explicó Dimu.

De esta manera, el precio por tonelada para Brasil todavía es mayor, promedia US$ 5.600 por tonelada este año.

Otro segmento que crece es la venta a Estados Unidos de cortes con hueso, algo que es posible en base a los compartimentos que garantizan una sanidad diferencial a partir de las restricciones que genera vacunar contra la fiebre aftosa.

Uruguay ya suma 11 compartimentos de alta bioseguridad –y cuatro más serán habilitados antes de fin de año– destinados a la exportación de carne con hueso, un producto exportado a Estados Unidos y Japón, pero que no es de interés en el mercado chino.

Jorge Bonino Morlan, asesor privado e integrante de la delegación uruguaya ante la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE), dijo a Tiempo de Cambio de radio Rural que “el buen precio pago por la carne ovina y especialmente de compartimentos hace que la ecuación sea muy favorable. Esto se traduce en una mayor demanda por parte de invernadores y también de criadores de corderos”.

“La carne de compartimento tiene un sobreprecio de 25% sobre el último precio publicado por el INAC para carcasas de menos de 18 kilos y de 20% para carcasas superiores a 18 kilos. Y un aumento de 5% si se cumplen los tiempos estipulados de cargas en ambos casos”, explicó Bonino.

 

 

 

La consolidación de los precios del cordero por encima de los US$ 4 y el aumento aún mayor proporcionalmente para las categorías adultas,  llevan a pensar que si los precios de la lana siguen estables, los ovinos recibirán una señal tan firme como los vacunos en cuanto a la necesidad de producir más para un mercado ávido por carnes de todo tipo. Y ese impulso puede seguir por varios años más.

Producción: Cecilia Pattarino

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