El camino hacia la sostenibilidad corporativa

Siguiendo lo tratado en el artículo anterior “Uruguay 2030, será mundialista de la Sostenibilidad”, ahora nos enfocaremos en un camino posible para iniciar el recorrido, sin retorno, de la sostenibilidad.

¿Qué es la sostenibilidad en las empresas?

La sostenibilidad en la empresa es el conjunto de acciones que la empresa realiza para mantener su actividad económica, teniendo presente los factores sociales, medioambientales y todo esto mediante un gerenciamiento responsable con los recursos. La sostenibilidad empresarial es una forma de gestionar los recursos de la organización para que sean más eficientes (para la empresa, el medioambiente y la sociedad).

¿Qué pasos deben de dar las empresas para alcanzar la Sostenibilidad?

Aquellas empresas que incorporan la sostenibilidad como parte de la estrategia del negocio obtienen una ventaja competitiva y está conlleva a un mayor respaldo de los consumidores. Los pasos para que una empresa pueda implementarla, se podrían resumir en los siguientes:

Análisis de materialidad: proceso que permite identificar los temas más relevantes para la empresa y priorizarlos, al mismo tiempo como impactan sobre los grupos de interés y en el modelo de negocio.

Diagnóstico de la empresa: evaluar las condiciones de partida en materia de sostenibilidad, identificar riesgos, oportunidades de mejora y de innovación. Esta evaluación inicial da la oportunidad de elaborar una ruta de proyecto a mediano y largo plazo, así como establecer objetivos de forma clara. Aquí se determinan las partes interesadas o stakeholder. En esta etapa es recomendable como referencia las prácticas exitosas de otras empresas en el mismo segmento en relación con la sostenibilidad y adecuarlas a la realidad de la empresa para incorporar al plan de acción.

Marca objetivos: aspecto que señalan los expertos es la delimitación de objetivos específicos, los cuales deben ser realistas, específicos, medibles y acotados en el tiempo.

Estrategia de sostenibilidad: conjunto de acciones a implantar por las empresas para asegurar que su actividad no tiene un impacto negativo a nivel medioambiental, económico y social. Esta debe ser adecuada y estar alineada con la misión y visión de la empresa. Debe establecer la pauta para cumplir los objetivos. La estrategia de sostenibilidad analiza las necesidades de los clientes y busca redefinir la manera de proporcionar sus bienes y servicios para obtener un beneficio económico sostenible, actuando con responsabilidad social y reduciendo los impactos ambientales.

Actúa en sostenibilidad: es el punto guía, que llama a la acción. En esta instancia es necesario comenzar a realizar actividades concretas para integrar la sostenibilidad al corazón de la organización. Como, por ejemplo, establecer políticas de inclusión a personas LGTBIQ+, reducir el uso del plástico, incorporar prácticas de reciclaje o desarrollar políticas sobre la cadena de suministro.

Monitorear los resultados: se requiere evaluar el desempeño obtenido mediante los indicadores de sostenibilidad, estos funcionan como una herramienta con la que se puede medir el éxito de las estrategias de una empresa.

Los indicadores de sostenibilidad corporativa se dividen en 3 categorías indicadores de sostenibilidad: ambiental, social e institucional.

Informar y comunicar los progresos: por último, desde el Pacto Mundial resaltan la importancia de elaborar una memoria de sostenibilidad: es un ejercicio comunicativo que complementa el proceso de la gestión.

Como ya mencionamos, la sostenibilidad empresarial son los esfuerzos que una empresa realiza para sostener su actividad económica, considerando factores sociales y medioambientales, y haciendo de su gestión, una acción responsable con los recursos.

A manera de ejemplo, se pueden llevar a cabo actividades y acciones del día a día teniendo en cuenta criterios sociales, económicos y medioambientales que aseguren la continuidad y el éxito del negocio.

Utilizar recursos de la zona. Utilizar las ventajas y los recursos propios del territorio en el que se desarrolla la actividad de la empresa, así como hacer compras a proveedores locales o cercanos para ahorrar en transporte y contaminar menos.

3Rs: reducir, reciclar y reutilizar. Es importante que las empresas busquen reducir la entrada de elementos y reutilizar aquellos que ya han entrado alguna vez en la economía empresarial.

Fomentar la sostenibilidad dentro de la oficina. Impulsar las buenas prácticas sostenibles en la diaria de los profesionales de la empresa. Partiendo de colocar recipientes de reciclaje, hasta facilitar botellas o utensilios reutilizables.

Sensibiliza a los empleados con el cuidado del medioambiente. Aplicar la sostenibilidad en la cultura empresarial mediante campañas de sensibilización al staff. Aquí debe tener una activa participación la comunicación interna.

Fomentar el uso del transporte público. Intentar que los empleados puedan tener la opción de llegar hasta el lugar de trabajo en transporte público, contribuirás al cuidado del medio ambiente reduciendo las emisiones del CO2.

Gestión y ahorro de los recursos. Aplicar políticas de reutilización de recursos o reducción de las cantidades generadas. Fomentar acciones que reduzcan el consumo energético (apagar los equipos y las luces cuando no se estén usando, ajustar la temperatura de los aires acondicionados, aprovechar la luz solar al máximo).

Priorizar las herramientas digitales. Reducir al máximo el consumo de papel y hacer uso de las herramientas digitales que tenemos disponibles hoy. En ocasiones necesarias, utilizar papel reciclado.

La sostenibilidad llegó para quedarse, es presente y futuro. Y, por tanto, las empresas sostenibles serán las empresas del futuro. La sociedad (el consumidor) está cada vez más exigente y consciente de la necesidad de proteger el entorno en el que vivimos, por lo que toda organización debería caminar en esta misma dirección.

Hoy las principales barreras al ingreso a mercados no son arancelarias, sino que son para arancelarias y las barreras relacionadas a la sostenibilidad, cada vez serán mayores.

La sostenibilidad aporta credibilidad, confianza y buena reputación, influyendo además de forma positiva en las personas que trabajan en ella.