La incautación de casi 1.000 kilos de cocaína encontrada en camionetas que llegaron este miércoles al puerto de Montevideo se dio luego de un detalle detectado por el personal de la compañía que gestionó la importación de los vehículos.
Cuando las camionetas –que llegaron en un barco proveniente de Santos, Brasil– pisaron territorio uruguayo y llegaron al depósito al que estaban destinadas, algunas estaban "bajas", como si la suspensión de los vehículos estuviera exigida. Eso llamó particularmente la atención, ya que estaban recién salidas de fábrica, indicaron a El Observador fuentes de la investigación. Y, en efecto, al abrir las partes traseras de los vehículos, observaron que allí se encontraban los bolsos con el cargamento.
Fue entonces que la compañía se comunicó a las 11.44 horas con el director general de Secretaría del Ministerio del Interior, Luis Calabria, quien luego puso al tanto de la situación a la Dirección General de Lucha contra el Tráfico Ilícito de Drogas.
Los efectivos de esta unidad no perdieron tiempo y de inmediato fueron hasta el lugar a inspeccionaron las camionetas, cuando la mayoría de ellas ya estaban en esa planta, el lugar al que estaba previsto que fueran trasladados todos los vehículos importados. Fue ahí, repartidos en cuatro camionetas, que fue confiscada la mayor parte de la droga, y otro tanto fue localizado en los vehículos que todavía estaban en la terminal portuaria.
El ministro Jorge Larrañaga dio una conferencia al término del operativo, en la que adelantó algunos detalles de la indagatoria, que está a cargo de la fiscal de Estupefacientes Mónica Ferrero. "Estamos en condiciones de expresar que el hallazgo del día de hoy va a andar entre unos 750 y 800 kilos de presumiblemente cocaína", aseguró el ministro, cuando todavía faltaba el pesaje. Fuentes de la causa señalaron que finalmente se confiscó casi una tonelada de cocaína.
Por otra parte, Larrañaga también anticipó este miércoles su opinión de que la marca de las camionetas no necesariamente sea objeto de esta investigación. "Los vehículos son de una marca de plaza, que fueron presumiblemente escogidos para guardar la droga, lo que no significa que la marca tenga un involucramiento", aseguró.
En el lugar, además del ministro y la policía, estuvo presente la fiscal Ferrero, que en la misma jornada tenía una audiencia judicial en la que se acordó la condena de las dos personas que habían sido detenidas el día anterior, tras un operativo donde fueron incautados 174 kilos de pasta base en un auto que venía del norte del país con dirección a Montevideo.
El secretario de Estado afirmó además que el barco que trajo los vehículos salió del puerto de Santos, y que antes de llegar a la capital uruguaya pasó por el de Zárate (Argentina), que da al río Paraná, por lo que el cargamento puede haber sido colocado en cualquiera de esos puntos.
Hasta el momento, los investigadores no tienen personas identificadas para ser indagados o detenidas, y las fuentes del caso señalaron que se tratará de una indagatoria compleja, ya que se deberá reconstruir la maniobra con varios días de atraso.
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