En su última reunión del año, el Secretariado Ejecutivo del
Frente Amplio decidió este miércoles que la coalición de izquierda siga trabajando durante el verano para llegar a los primeros meses de 2017 con una política de alianzas a corto y mediano plazo ya delineada.
El FA tiene por delante la realización en marzo de un Congreso –continuación del realizado a finales de noviembre- y de un Plenario Nacional en abril. Uno de los cometidos de esas instancias es la elaboración de una carta de principios y la discusión de la futura estrategia política.
En el encuentro, el diputado Óscar de los Santos (Alianza Progresista) propuso, y fue aceptado, que la comisión formada para avanzar en la organización del Congreso y el Plenario analice de qué manera y con qué aliados encarará la izquierda los desafíos que se le presentarán en el correr de este gobierno.
El FA perdió la mayoría parlamentaria tras la disidencia del diputado Gonzalo Mujica y se propone negociar proyecto a proyecto con ese legislador y con los integrantes de la
oposición que estime más conveniente. De Los Santos ya propuso prestarle más atención a la voz de los sectores minoritarios del Frente Amplio y permitirles discrepar sin que eso termine necesariamente en un enjuiciamiento del Tribunal de Conducta. De los Santos dijo que el alejamiento de Mujica revela que la izquierda debe plantearse un nuevo pacto político para evitar futuras deserciones.
El legislador piensa en un acuerdo similar al que en 1994 le dio vida al Encuentro Progresista, coalición que permaneció activa hasta las elecciones de 2004 y permitió sumar votos junto a dirigentes como el actual canciller Rodolfo Nin Novoa, procedente del Partido Nacional.