Fila desde las cinco de la mañana para acceder a préstamos del BROU

No lo lograron. Antes de ellos en la fila hay seis personas que, habiendo prestado atención a las noticias de los últimos días, también tomaron la precaución de ir cuatro horas antes del horario especial de atención anunciado por el banco estatal, que va de 9 a 12 horas. Minutos antes de que se abran las puertas al público, la fila da vuelta la avenida 18 de Julio y ocupa casi por completo la cuadra de Magallanes donde está una de las cara laterales del edificio, que ocupa una cuadra entera del centro de Montevideo. 

Esta situación anormal en la sede del BROU se registra desde el miércoles de 18, según informó Subrayado. Ese día, la entidad financiera habilitó la solicitud de préstamos para pasivos en forma presencial en cualquiera de las sucursales y para el público en general.

La campaña comenzó el 5 de diciembre y se extenderá hasta el 30 de este mes inclusive, pero hasta el 11 de diciembre solo se podía gestionar a través del sitio web del BROU. A partir del 12 de diciembre y hasta este martes, quedaron habilitados para acceder al préstamo en forma presencial los jubilados y pensionistas que cobraban sus pasividades a través de una cuenta del banco estatal. Y este miércoles, la tramitación presencial quedó habilitada para todos los pasivos. 

Esto fue lo que condujo a que incrementara la cantidad de personas haciendo fila con anticipación en la entrada de la principal sucursal del BROU en la capital. Una de ellas es Celia Márquez, quien este viernes cuenta a El Observador que ese era su tercer intento para acceder a un número y ser atendida. La primera vez fue el miércoles 18: sobre la hora 12 ya se había acabado el cupo de personas que el banco pensaba atender, según dijo. Al día siguiente, el jueves, desistió porque se descompuso por el calor. 

El Observador

Mientras Márquez narra cómo debieron traerle agua y ser asistida para tomarse un taxi que la dejara en su casa, se suma a la conversación Julio Otero, el hijo de una pensionista que el día anterior también había intentado acceder al préstamo, pero sin éxito. Por eso él, previendo la demora, le ofreció a su madre ir de madrugada para guardarle un lugar. 

"Es un disparate, acá todos son viejos, personas mayores. Por lo menos deberían darle prioridad a los jubilados que tienen dificultad para caminar, ¿no? Mirá a ese señor, pobre", aclama en voz alta Otero, y con el termo que antes tenía bajo el hombro apunta a un hombre de unos 80 años que se sostiene encorvado sobre dos bastones con codo. 

Consultados por El Observador, los jubilados coinciden en los motivos por los que quieren acceder a este préstamo, que es promocionado como el que tiene "la tasa más baja", entre otras "condiciones especiales". Los regalos y festejos de fin de año, sumado a la posibilidad de pasar las vacaciones de verano en algún balneario costero o pagar las cuentas con mayor comodidad son las cuatro razones por las que los pasivos hacen fila en la mañana de este viernes. 

Entre el 5 y e 18 de diciembre, el Banco República tramitó más de 74.000 préstamos, según informó El País. Fuentes de la entidad financiera dijeron a El Observador el 12 de diciembre, cuando quedó habilitada la atención presencial para pasivos que cobran en cuentas del BROU, se gestionaron 7.400 créditos en sucursales. Ese es un número considerablemente menor al que se registró en el primer día de la campaña de 2018, cuando se otorgaron 9.900 préstamos.