Después de la tormenta que causaron sus declaraciones, en las que admitía haber usado la tarjeta corporativa para pagar aportes mensuales al Partido Nacional, el exdirector del
Banco República (BROU) Pablo García Pintos anunció este viernes que devolverá "hasta el último vintén".
Según datos a los que accedió El Observador, a raíz de un pedido de informe realizado por legisladores frenteamplistas, García Pintos retiró $ 141.500 en efectivo con su tarjeta corporativa, desde febrero de 2001 a octubre de 2004. Teniendo en cuenta la trayectoria de la inflación desde aquellos años, esa cifra equivale a unos $ 333.000 actuales (US$ 11.350).
De acuerdo a las propias declaraciones de García Pintos, esos adelantos que retiraba en efectivo eran "para pagar los aportes al partido". Este jueves, luego de que el semanario Búsqueda publicara, en base al informe de los legisladores del FA, que cuatro exjerarcas del BROU de los partidos tradicionales gastaron más de US$ 21.000 con sus tarjetas corporativas entre 2000 y 2005, Pablo García Pintos –uno de los involucrados– salió públicamente a defender sus gastos pero, en ese intento, acabó ventilando una situación aún más irregular.
"Atento a la trascendencia política que ha tenido el caso, voy a devolver hasta el último vintén de lo pagado con la tarjeta, según me indique el BROU", dijo el exjerarca este viernes.
Cuando en radio Sarandí se lo consultó acerca de por qué retiraba "adelantos en efectivo" una vez por mes, García Pintos respondió que la causa era "muy sencilla".
"Eran obligaciones que tenía para contribuir al partido. En determinado momento el partido exigió una cantidad mayor de aportes", dijo. Luego de que los periodistas le indicaran que ese dinero era del Banco República, y no de su salario, García Pintos argumentó que era dinero que él "tenía derecho a sacar" y que era un sistema "que estaba aceptado por el resto del directorio".
Renuncia
Este jueves, el PN emitió una declaración rechazando "enfáticamente" los dichos de García Pintos, y afirmando desconocer "el origen de los aportes por él realizados en su condición de director del BROU, a los que estaba obligado por la Carta Orgánica del Partido". También convocaron de urgencia a la Comisión de Ética para que analice sus gastos y los del otro director blanco de la época, Carlos Rodríguez Labruna.
Un día después, García Pintos comunicó al programa Claves Políticas que presentará su renuncia al
Partido Nacional, aunque dijo estar tranquilo con su conducta.
Pablo García Pintos retiró $ 333.000 entre 2001 y 2004 con su tarjeta corporativa por concepto de "adelanto efectivo" en cajeros automáticos. Según explicó este jueves, ese dinero era para aportes al Partido Nacional.
"Quiero decir que estoy tranquilo con lo actuado porque todo fue bajo el paraguas de un uso discrecional sobre
tarjetas corporativas que regía en ese momento", comentó el exdirector del BROU a la producción del programa que será emitido el lunes.
Y agregó: "Lo segundo es que atento a la trascendencia política que ha tenido el caso, quiero anunciar que voy a devolver hasta el último vintén de lo pagado con la tarjeta, según lo que se me indique del BROU, y cuando digo devolver todo, es lo de los dos períodos, porque yo estuve desde 1995 y ya se manejaba así, y voy a devolver todo". El informe en manos de los legisladores del FA solo incluía las compras del período 2000-2005.
Por eso, el anuncio del exjerarca presenta un desafío: definir cuántas veces y por qué monto total realizó sus aportes al partido.
Fuentes nacionalistas dijeron a El Observador que en los registros contables del Partido Nacional no aparecen anomalías, y que los aportes de García Pintos equivalen en cuantía a lo que pedía el partido, es decir, 5% del sueldo del funcionario.
En ese entonces, señalaron las fuentes, los aportes se pagaban por vía de un cobrador, y se solía hacer en efectivo. Por eso, la hipótesis de los dirigentes blancos es que, sin que fuera advertido por las autoridades partidarias, García Pintos usaba billetes extraídos de su cuenta corporativa y no de su sueldo de director.
FA pide votar ley de financiamiento
A raíz del "tenor" de las declaraciones de Pablo García Pintos,
el Frente Amplio emitió una declaración este viernes en la que define como "urgente e impostergable culminar el debate y la aprobación de la nueva ley de financiación de los partidos políticos, elemento indispensable en la búsqueda de garantías de transparencia y confiabilidad del sistema democrático". La ley, impulsada por el oficialismo, cuenta con media sanción del Senado.
Además, la coalición de gobierno "reafirma su confianza en el sistema democrático que asegura el cumplimiento de la voluntad popular, y habilita los mecanismos para corregir los desvíos de las conductas públicas".