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¿Gesto antideportivo o accidente? El maratonista que tiró las botellas de agua explicó qué pasó
Una de las últimas imágenes polémicas que dejaron los Juegos Olímpicos de Tokyo 2020 fue la de un atleta francés que corrió la maratón del pasado domingo y que en un puesto de hidratación tiró prácticamente todas las botellas de agua, logrando tomar una de las últimas y dejando a los demás corredores sin poder refrescarse en una prueba que estuvo marcada por el calor.
El video del momento circuló inmediatamente y hubo reacciones, entre algunos que decían que había sido sin querer y muchos que decían que lo había hecho intencionalmente para perjudicar a sus rivales mientras corrían con temperaturas cercanas a los 30°C y alta humedad, acusándolo de tramposo y de una actitud antideportiva.
Después de lo ocurrido, el corredor que protagonizó el hecho, el francés Morhad Amdouni, hizo declaraciones para explicar qué había pasado y defenderse.
El maratonista que finalizó en el puesto 14° de la prueba que tuvo 31 abandonos, negó que haya tirado las botellas a propósito, antes de tomar la última y llevársela mientras corría.
Amdouni explicó que el motivo de su accidente fue que las botellas estaban “resbaladizas”.
“Con el cansancio y todo eso, poco a poco fui perdiendo lucidez y energía, mientras aguantaba”, señaló en su Instagram en una primera publicación en sus redes. “Me gustaría disculparme con los atletas. En un momento, traté de poder sostener una botella de agua, pero se me cayó un poco. No fue fácil", agregó.
Luego, en su Facebook, con un video de las imágenes de la polémica, expresó: "Para garantizar la frescura de las botellas, se sumergen en agua. Lo que las vuelve resbaladizas. Sin embargo, está claro que estoy tratando de tomar una botella desde el inicio de la fila pero apenas las tocamos, se deslizan".
“Para acabar con todas las polémicas estériles que genera el video, pongo este video para entender realmente lo que sucedió", agregó Amdouni en su publicación que luego fue bajada.
El maratonista agregó en sus redes que estuvo a punto de abandonar porque sintió una molestia en sus isquiotibiales, pero fue “optimista” y decidió seguir, aunque tuviera que caminar para finalizar porque era los Juegos Olímpicos. “Fue un infierno, créanme”, expresó.
