Kiev afirma que logró avances en su contraofensiva para recuperar terreno en el sur del país

"Un depósito de municiones enemigo fue destruido cerca de Tomina Balka, al igual que resultaron destruidos un puente flotante cerca del pueblo de Lvove y un centro de control del Ejército ruso al sureste de Jerson”, especifica el texto.

El presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, anunció por su lado la recuperación de "dos localidades en el sur" y de una tercera en el este, sin precisar sus nombres. En tanto, el jefe adjunto de la administración, Kirilo Timochenko, comentó que la bandera ucraniana fue izada en el pueblo de Visokopillia, en el norte de Jerson.

Se trata de zonas controlada en su casi totalidad por el Ejército ruso desde mediados de marzo pasado. "La contraofensiva está haciendo avances verificables en el sur y el este", estimó por su parte el centro de análisis Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW) con sede en Estados Unidos.

"Las fuerzas ucranianas están avanzando a lo largo de varios ejes en el oeste de la región de Jerson, y se aseguraron un territorio del otro lado del río Siversky Donets, en la región de Donetsk", añadió el ISW. Según el mando sur del Ejército ucraniano, el objetivo es perturbar los sistemas de gestión de tropas y la logística rusa con ayuda de ataques aéreos y de la artillería.

La información difundida por el Ejército ucraniano se conoció horas antes que el presidente Vladimir Putin acusara al gobierno ucraniano de bloquear la posibilidad de un diálogo entre ambos países. “Todo los intentos de resolver este problema de forma pacífica han fracasado debido a las posiciones del régimen de Kiev", dijo el mandatario.

En el marco de una reunión con los delegados del Foro Ambiental Juvenil de Rusia, Putin reiteró su posición al señalar que “la tragedia en Donbás es resultado de las actividades del régimen neonazi” y, en palabras del mandatario, “el deber de Rusia es ayudar a la población de las repúblicas autoproclamadas de Lugansk y Donetsk que llevan ocho años luchando por su soberanía”.

"La tragedia es consecuencia del régimen nacionalista y neonazi que tomó el poder por la fuerza en 2014 y que luego lanzó operaciones militares en Donbás. En dos ocasiones han llevado a cabo importantes operaciones militares con artillería, aviación, equipos pesados, etc. Y todo esto sigue ocurriendo", dijo Putin.

El presidente ruso afirmó estar “asombrado” por “la valentía de los militares rusos que defienden a los habitantes de Donbás” e insistió en que la OTAN y la Unión Europea "cayeron en su propia trampa contra Putin". Por su parte, tras el comunicado del mando Sur ucraniano, el Ministerio de Defensa ruso confirmó que la contraofensiva de Kiev busca dañar la logística de las tropas de Moscú y afirmó que los ataques militares de Rusia “no están dirigidos contra instalaciones civiles, sino que buscan inutilizar la infraestructura bélica”.