La Comisión de Salud de China dejó de publicar las cifras diarias de contagiados y muertos

Pese al vacío estadístico que generará la decisión, los expertos relativizaron su impacto al señalar que los números oficiales ya no reflejaban la inédita ola de contagios que golpea al país desde el 7 de diciembre pasado, cuando Beijing relajó las medidas de control, las más estrictas del mundo.

Antes, las pruebas PCR, que eran casi obligatorias, permitían seguir con fiabilidad la tendencia de la epidemia. Ahora, luego de las protestas registradas en varias ciudades contra los confinamientos masivos y en virtud de la modificación para aplacarlas, las personas contagiadas se hacen pruebas en sus casas y habitualmente no reportan los resultados a las autoridades, lo que impide tener cifras fiables.

"A partir de hoy, ya no publicaremos los datos diarios sobre la epidemia", indicó la Comisión Nacional de Salud, que funciona como un ministerio, en un comunicado, que recoge la agencia de noticias AFP. El ente solo agregó que de ahora en más, el Centro Chino para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) publicará informes sobre la epidemia orientados a tener referencias y a la investigación, pero sin precisar qué datos ni con qué frecuencia.

Según los observadores locales, muchos crematorios han informado recientemente de una llegada inusualmente alta de cadáveres, situación que sin embargo ha sido ignorada en gran medida por los medios chinos, que sí han abordado, aunque en poca medida, la tensión que se registran en los hospitales y la escasez de antifebriles en las farmacias.

Otra controversia que desacreditó las estadísticas oficiales es una nueva metodología impuesta, según la cual solo las personas fallecidas directamente de una insuficiencia respiratoria vinculada al virus se contabilizaban. En este contexto, y desde que Beijing levantó las restricciones a principios de diciembre, las autoridades solo han notificado de manera oficial seis muertes por Covid-19.

No obstante, en Qingdao, una ciudad de 10 millones de habitantes, se registraron medio millón de contagios diarios en una semana, según un encargado municipal de salud citado por la prensa oficial. Una situación que se repite en otras grandes urbes, lo que ha llevado a las autoridades a confiscar suministros médicos y pruebas de diagnóstico, al tiempo que racionan la venta de antifebriles a seis comprimidos por persona por semana para contrarrestar el acaparamiento por parte de la población.

Según los medios locales, muchas farmacias quedaron desabastecidas luego de la repentina decisión del gobierno, que en las últimas horas volvió a instar mediante una campaña de comunicación a las personas con síntomas leves a quedarse en sus casas y tratarse ellas mismas, lo que ha llevado a la compra compulsiva de analgésicos y de pruebas de antígenos.

En este contexto, al menos 11 de los 42 fabricantes de test de diagnóstico cuyos productos están autorizados por los reguladores del país han visto gran parte de su producción requisada, o bien han recibido órdenes de entregarla, como en el caso de Wiz Biotech, un fabricante de test de la ciudad meridional de Xiamen, según AFP.

En Beijing, en tanto, las autoridades reforzaron la dotación de personal técnico y profesional de seis fabricantes de kits de diagnóstico rápido para ayudarlos a "aumentar la producción", dijo el gobierno municipal en su web, al tiempo que informó medidas de racionamiento.

"La industria y las autoridades están tomando medidas para asegurar la producción, pero la logística está lejos de ser fluida, especialmente en los canales tradicionales, como hospitales y farmacias", explicó Zhou Zhicheng, director de la Federación China de Logística y Compras.

El aumento de casos también se refleja en los hospitales. En Shanghái, la agencia AFP constató que los corredores de la sala de emergencias de un hospital local estaban atestados de camillas con pacientes conectados a botellas de oxígeno y que las improvisadas camas desbordaban la sala de emergencias y llegaban hasta la recepción del establecimiento.