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La harina para arepas se hace ver en Uruguay
Un inmigrante venezolano empezó a importarla hace año y medio y hoy se vende en unos 60 puntos de Montevideo y el interior
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31 de agosto de 2017 a las 05:00
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El desabastecimiento de los pañales y la leche para su bebé de por entonces un año fue el punto detonante en 2015 para que el venezolano José Rivas le dijera a su esposa: "Nos vamos a Uruguay". Para realizar las tradicionales arepas venezolanas en su nuevo hogar uruguayo, Rivas le pedía a personas que viajaban a su país que le trajeran harina de maíz, hasta que hace un año y medio empezó a importar por su cuenta ese producto. "Intenté hasta hacer arepas con polenta y fue un fracaso", recordó entre risas.
Hoy Importadora Rivas abastece unos 60 puntos de venta distribuidos entre Montevideo (donde se encuentra la mayoría), Canelones, Maldonado, Colonia, San José y Soriano.
Harina para un uruguayo es sinónimo de trigo refinado. Sin embargo, Rodríguez encontró una demanda por una alternativa a ese alimento que le permitió introducir un tipo de harina que hasta el momento era casi inexistente en el mercado uruguayo: la harina de maíz conocida en países como Venezuela o Colombia como Harina PAN (por el nombre de la marca).
Si bien en Uruguay hay una buena producción de harina de maíz por la polenta, según Rodríguez, no hay ninguna empresa que produzca el tipo de harina refinada y precocida que ofrece la marca PAN, materia prima para hacer arepas –panes de maíz típicos en la cocina venezolana y colombiana–.
"Más que ocurrencia, el tener harina de maíz es una necesidad para nosotros los venezolanos. Las arepas son como para los uruguayos el fainá, el chivito o la pizza", explicó Rivas, quien en su país se desempeñaba como ejecutivo en una empresa.
"Hecho en Estados Unidos", se lee en el reverso del paquete de un kilo que llega a Uruguay. Es que si bien la marca PAN le pertenece a la venezolana Polar, la crisis económica en Venezuela hizo que hoy en el país solo se produzca para cubrir la demanda interna y Polar migró su producción a Estados Unidos y Colombia.
La Molienda, Decreto Natural, El Naranjo, entre otros locales, ofrecen ahora Harina PAN.
Además, desde fines de agosto la cadena de supermercados Tienda Inglesa tiene la harina en las góndolas de varios de sus locales de Montevideo y el interior. Otros de sus clientes habituales son restaurantes venezolanos en Montevideo.
La rápida expansión de la demanda de este producto en Uruguay tiene dos explicaciones principales.
Por un lado, el aumento de inmigrantes procedentes de países caribeños. De acuerdo con información de Ministerio de Relaciones Exteriores hay alrededor de 7.000 venezolanos y 2.000 colombianos en Uruguay.
Por otra parte, si bien los extranjeros son los que más consumen esta harina, el aumento de la demanda del público local se evidencia en números. Según los principales locales en donde se vende el producto, entre 15% al 20% del total de clientes de la Harina PAN son uruguayos.
El cambio en los hábitos alimenticios de los uruguayos fue percibido como una oportunidad de mercado para la importadora Rivas.
"Hay una onda desde hace un tiempo: la gente trata de comer algo más sano. Más granos, más harinas sin gluten y la harina de maíz resulta interesante en ese sentido", apuntó Rivas.
Por eso la marca tiene participación en ferias naturistas como Camino Verde y uno de sus primeros clientes fueron tiendas para personas que no pueden consumir trigo, avena, cebada y centeno (TACC), como los celíacos.
La semana pasada, en El almacén del Celíaco, ubicado en el Mercado Agrícola de Montevideo (MAM), una clienta sostenía una bolsa de harina PAN mientras reflexionaba: "Los que no tenemos más remedio, tenemos que aprender cosas nuevas".
De acuerdo con datos de la Asociación Celíaca del Uruguay (Acelu), uno de cada 100 uruguayos es celíaco. Y el diagnóstico de esta enfermedad es cada vez más frecuente, explicó la presidenta de Acelu, Susana Tchekmedian.
"El uruguayo es un público que suele mantener las tradiciones de comida y hay un desconocimiento del producto", opinó.
Para resolver ese desafío, además de elaborar videos con recetas de alimentos que se pueden hacer con harina de maíz y proyectarlos en distintos puntos de venta, se colocó al producto en puntos clave de la cultura popular uruguaya.
Hoy Importadora Rivas abastece unos 60 puntos de venta distribuidos entre Montevideo (donde se encuentra la mayoría), Canelones, Maldonado, Colonia, San José y Soriano.
Harina para un uruguayo es sinónimo de trigo refinado. Sin embargo, Rodríguez encontró una demanda por una alternativa a ese alimento que le permitió introducir un tipo de harina que hasta el momento era casi inexistente en el mercado uruguayo: la harina de maíz conocida en países como Venezuela o Colombia como Harina PAN (por el nombre de la marca).
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Si bien en Uruguay hay una buena producción de harina de maíz por la polenta, según Rodríguez, no hay ninguna empresa que produzca el tipo de harina refinada y precocida que ofrece la marca PAN, materia prima para hacer arepas –panes de maíz típicos en la cocina venezolana y colombiana–.
"Hecho en Estados Unidos", se lee en el reverso del paquete de un kilo que llega a Uruguay. Es que si bien la marca PAN le pertenece a la venezolana Polar, la crisis económica en Venezuela hizo que hoy en el país solo se produzca para cubrir la demanda interna y Polar migró su producción a Estados Unidos y Colombia.
Explicaciones de una expansión
Según Rivas, actualmente su importadora trae a Uruguay alrededor de 12 toneladas de harina de maíz cada tres meses. "En los últimos seis meses hemos tenido que aumentar varias veces el pedido. Empezamos llamando para promocionarla y ahora nos llaman las tiendas interesadas en vender el producto".La Molienda, Decreto Natural, El Naranjo, entre otros locales, ofrecen ahora Harina PAN.
Además, desde fines de agosto la cadena de supermercados Tienda Inglesa tiene la harina en las góndolas de varios de sus locales de Montevideo y el interior. Otros de sus clientes habituales son restaurantes venezolanos en Montevideo.
La rápida expansión de la demanda de este producto en Uruguay tiene dos explicaciones principales.
Por un lado, el aumento de inmigrantes procedentes de países caribeños. De acuerdo con información de Ministerio de Relaciones Exteriores hay alrededor de 7.000 venezolanos y 2.000 colombianos en Uruguay.
Por otra parte, si bien los extranjeros son los que más consumen esta harina, el aumento de la demanda del público local se evidencia en números. Según los principales locales en donde se vende el producto, entre 15% al 20% del total de clientes de la Harina PAN son uruguayos.
El cambio en los hábitos alimenticios de los uruguayos fue percibido como una oportunidad de mercado para la importadora Rivas.
"Hay una onda desde hace un tiempo: la gente trata de comer algo más sano. Más granos, más harinas sin gluten y la harina de maíz resulta interesante en ese sentido", apuntó Rivas.
Por eso la marca tiene participación en ferias naturistas como Camino Verde y uno de sus primeros clientes fueron tiendas para personas que no pueden consumir trigo, avena, cebada y centeno (TACC), como los celíacos.
La semana pasada, en El almacén del Celíaco, ubicado en el Mercado Agrícola de Montevideo (MAM), una clienta sostenía una bolsa de harina PAN mientras reflexionaba: "Los que no tenemos más remedio, tenemos que aprender cosas nuevas".
De acuerdo con datos de la Asociación Celíaca del Uruguay (Acelu), uno de cada 100 uruguayos es celíaco. Y el diagnóstico de esta enfermedad es cada vez más frecuente, explicó la presidenta de Acelu, Susana Tchekmedian.
Cultura popular
La intención de Rivas es que el producto se instale en la cultura uruguaya."El uruguayo es un público que suele mantener las tradiciones de comida y hay un desconocimiento del producto", opinó.
Para resolver ese desafío, además de elaborar videos con recetas de alimentos que se pueden hacer con harina de maíz y proyectarlos en distintos puntos de venta, se colocó al producto en puntos clave de la cultura popular uruguaya.
Por ejemplo, hay puestos de arepas auspiciados por PAN en la emblemática feria de Tristán Narvaja de los domingos y en carnaval en varios tablados.
"La idea es que le llegue a todos", apuntó Rivas.
"La idea es que le llegue a todos", apuntó Rivas.
