La primera nominación de May la enfrentó con Alemania y Francia

Uno de los primeros nombramientos que anunció Theresa May tras asumir el miércoles como primera ministra británica fue el del referente de la campaña por el brexit, Boris Johnson, como ministro de Relaciones Exteriores. La inesperada elección, después de que el exalcalde de Londres se retirara de la carrera para suceder a David Cameron hace dos semanas, generó sarcasmo y críticas en Europa.

Aunque el rol del dirigente en las negociaciones sobre la salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE) será limitado, Johnson dijo este jueves que ese proceso no significa abandonar Europa. "Hay una gran diferencia entre el hecho de que vamos a abandonar la UE y nuestra relación con Europa, que en cualquier caso va a verse reforzada", sostuvo en su primera declaración.

Johnson, que deberá reunirse con sus colegas europeos por primera vez el lunes en Bruselas, no dirigirá las negociaciones con la UE. Signo de la inmensa labor que espera a su gobierno, May, que es presionada por Europa para acelerar la ruptura, creó un ministerio enteramente dedicado al brexit. Al frente de esa cartera estará David Davis, exsecretario de Estado de Asuntos Europeos.

Tras la nominación de Johnson, hubo pocas reacciones oficiales de cancillerías extranjeras en forma de felicitaciones diplomáticas pero sí existieron muchas críticas, las más serias provenientes de Francia y Alemania.

"No estoy preocupado en absoluto (...), pero conocen bien su estilo, su método", señaló el canciller francés, Jean-Marc Ayrault, acusando a Johnson de haber "mentido mucho" durante la campaña sobre el brexit.

El jefe de la diplomacia alemana, Frank-Walter Steinmeier, acusó el miércoles por la noche a Johnson de haberse comportado de forma irresponsable tras el voto a favor del abandono de la UE. Según la agencia de prensa DPA, el jerarca señaló "responsables políticos que llevaron al país al brexit" para después, una vez tomada la decisión, "huir, no asumir sus responsabilidades y en lugar de eso, irse a jugar al cricket".

Aunque las declaraciones del ministro de Relaciones Exteriores alemán fueron hechas antes del nombramiento, ilustran su opinión sobre su homólogo británico. Si bien ahora volvió a tomar relevancia como canciller, tras la campaña por el brexit Johnson se perfilaba como sucesor de Cameron pero renunció a esa posibilidad por considerarse traicionado por otro dirigente conservador.

El que tampoco usó el estilo diplomático fue el presidente del parlamento europeo, el socialdemócrata Martin Schulz, quien acusó a May de "centrarse en satisfacer la cohesión interna del Partido Conservador" y "menos en el futuro del país". Además alertó contra el "impacto directo" que este "círculo vicioso" tendría sobre Europa.

El secretario de Estado estadounidense, John Kerry, se entrevistó este jueves por teléfono con su nuevo homólogo británico y afirmó que la relación entre los dos países seguía siendo "esencial", y pidió "un enfoque delicado y mesurado del proceso de brexit".

En tanto, la prensa europea osciló entre el sarcasmo y la crítica ante el inesperado nombramiento. El influyente semanario Der Spiegel comparó la situación con House of Cards, la serie televisiva que trata los entretelones de la política estadounidense.

Por su parte, el diario británico online The Independent dedicó un editorial a pedir "perdón" al mundo. "El único consuelo que queda de este nombramiento es el hecho de que Johnson podría odiar el trabajo. Reuniones infinitas y largos vuelos (...) suenan como castigo", razonó el diario de izquierda. "Pero eso no cambia el hecho de que estamos convirtiéndolo en un problema de ustedes tanto como lo es nuestro. Y por ello, genuina y sinceramente, les pedimos perdón", concluyó.