Si esa sociedad es democrática, en el sentido más clásico de la palabra, cuyo fundamento es ser una poliarquía, el tema central es cómo administrar esas ideas, valores y culturas diferentes para permitir la convivencia social y la gobernanza, cómo se crean y aplican reglas comunes para todos que fueren pacíficamente aceptadas por tirios y troyanos. La democracia es pues resolver esas diferencias, buscar la síntesis entre bases de pensamiento y sensibilidades diferentes, y si la síntesis no es posible, hacer prevalecer los valores de la mayoría con el mayor respeto posible a los derechos de los demás, que constituyen la o las minorías.
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