La actriz estadounidense Lindsay Lohan fue acusada formalmente por la justicia de su país en el marco de un caso que involucra también a otras celebridades como el youtuber devenido en boxeador Jake Paul y a otras seis figuras, señaladas por anunciar productos financieros vinculados a las criptomonedas sin revelar al público que se les había pagado por hacerlo.
Lohan y los demás acusados están involucrados en una causa que apunta directamente al empresario Justin Sun por comercializar activos de Tronix y BitTorrent sin registrarse ante las autoridades correspondientes y por tratar de manipular el corretaje de Tronix, simulando una actividad mercantil de esta moneda virtual que no existía en realidad.
Tanto Lohan como las otras figuras involucradas en la causa promocionaron estas criptomonedas como parte de una campaña promocional, sin advertir al público que se trataba de un anuncio, como estipulan las leyes estadounidenses.
La lista completa de figuras incluye a los raperos Ne-Yo, Akon, Lil Yachty y Soulja Boy, al músico Austin Mahone y a la actriz porno Kendra Lust.
Lohan y el resto de involucrados (con las excepciones de Soulja Boy y Mahone) acordaron con la justicia pagar una multa de US$ 400.000 de forma colectiva para saldar el caso.
La actriz de 36 años tiene prevista lanzar una nueva película este año, parte de su acuerdo por múltiples proyectos con la plataforma Netflix. Hace una semana, anunció que está embarazada de su primer hijo, junto a su pareja Bader Shammas.
Con información de AFP
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