En la sede de la cancillería de Colombia, el Palacio San Carlos, deliberan representantes del gobierno venezolano, de la opositora Plataforma Unitaria, y representantes de 19 naciones.
La apertura del encuentro estuvo a cargo del presidente Gustavo Petro quien comenzó con referencias al libertador Simón Bolívar, la figura central de la independencia tanto de venezolanos como de colombianos. En su alocución abogó para que “la solución a los problemas de Venezuela surja de los propios venezolanos”.
Sin embargo, dado su rol de promotor del diálogo señaló tres temas que son los que conversó él mismo martes con los representantes de la Plataforma Unitaria y en oportunidades anteriores con Nicolás Maduro.
El primero es que Venezuela regrese al sistema panamericano, aunque el propio Petro pidió una reforma de la Organización de Estados Americanos (OEA) para que no queden excluidas Cuba, Venezuela y Nicaragua.
El segundo tema abordado por el mandatario colombiano es la necesidad de que, de las conversaciones entre chavistas y antichavistas, surja un cronograma para las elecciones presidenciales de 2024.
El tercer punto es solicitar a los Estados Unidos y a la Unión Europea el fin del congelamiento de los fondos de Venezuela, la mayoría de ellos establecidos por la Reserva Federal de Estados Unidos durante el mandato de Donald Trump.
Sobre este asunto, que fue la piedra angular del abandono de las conversaciones en Ciudad de México por parte de los delegados de Maduro, en noviembre pasado, hay un punto a favor surgido en este mismo miércoles. El delegado de la Unión Europea, el catalán socialista Josep Borrell, se mostró a favor de levantar las sanciones.
Si bien este encuentro de Bogotá tiene el formato de conferencia y no de una reunión decisoria, otro punto favorable es el gobierno bolivariano mandó una delegación que está sentada cerca de los representantes opositores. Además, en su programa de televisión, el propio Maduro, dijo que estaba a favor del diálogo respetuoso.
Defendió su gobierno y detalló los diálogos mantenidos con diversos sectores. Y fue tajante respecto de las sanciones: “No aceptamos menos de esa conferencia de Bogotá, el levantamiento de todas las sanciones para que Venezuela tenga la libertad comercial, financiera, económica, y para recuperar todo lo que hay que recuperar en lo económico, productivo y social, para que se acabe el chantaje, la coerción, la coacción, la agresión permanente sobre nuestra vida social”.
Maduro añadió: “Es una jugada riesgosa (...) pero nosotros la hemos apoyado”. En el programa, el presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Jorge Rodríguez, recordó que ya se había acordado, con acuerdo de la oposición, con la participación de Naciones Unidas, “la creación de un fondo monitoreado por el organismo, para administrar una parte de esos fondos en beneficio del pueblo venezolano”.
Rodríguez agregó a la lista el oro de Venezuela retenido en Londres, en los bancos europeos y de Estados Unidos”
Maduro cargó contra el ex embajador de Estados Unidos en Venezuela durante la administración Trump, James Story, “que estoy seguro le pagó el pasaje a Juan Guaidó” en su viaje a Bogotá. Cabe recordar que Story volvió a su país cuando Washington y Caracas retiraron a los jefes de sus delegaciones diplomáticas.
En cuanto a Guaidó, el llamado “presidente designado”, no contaba con la visa necesaria para ingresar a la capital colombiana y la propia oposición venezolana no mostró ningún interés en que se sumara al encuentro. Petro y el canciller Álvaro Leyva le reprocharon que “ingresara ilegalmente a Colombia” y que con gusto le hubieran dado una visa.
(Con información de agencias)