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Para el Colegio y Liceo Sagrada Familia, el 2020 fue un año de desafíos, aprendizajes y crecimiento

En el momento de la llegada del coronavirus al país, el centro de estudios se encontraba en pleno proceso de implementación de un proyecto pedagógico en el que se destacaba la competencia digital
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30 de octubre de 2020 a las 05:04

El 13 de marzo, ante la aparición de los primeros casos de covid-19 en el país, el gobierno decretó -entre otras medidas- la suspensión de las clases presenciales. Para ese momento el Colegio y Liceo Sagrada Familia se encontraba en pleno proceso de implementación de un proyecto pedagógico en el que se reforzaban las competencias elegidas en el Diseño Curricular, destacándose la competencia digital.

El colegio ya contaba con casillas institucionales con dominio propio para los funcionarios y todos los estudiantes de Secundaria. Por otra parte, debido a la buena conectividad que lograron dentro del ámbito institucional, varios docentes tenían sus grupos funcionando en aulas virtuales. La propuesta informática se había diversificado hacia el área de la robótica, tanto en Secundaria como en Primaria. Esta etapa la cerraban con el proyecto “Un chromebook por estudiante” para alumnos de 1ero y 4to de Secundaria, con el cual se aseguraron la apertura hacia esta nueva modalidad de trabajo virtual.

Hacía ya varios años que se promovía desde la Institución una batería de acciones para estimular y favorecer el uso de las nuevas tecnologías en el aula, sin embargo se iba incursionando y gestionando gradualmente. El impacto del covid-19, en el caso del Colegio y Liceo Sagrada Familia, solo aceleró el proceso y lo potenció de cara al año 2021.

Cuando en marzo se resolvió -por seguridad y responsabilidad social- no reabrir las puertas del colegio, se encontraban en una situación favorable para afrontar esa nueva realidad sin perder el vínculo pedagógico con los estudiantes. Asertivamente se crearon las casillas institucionales de todos los educandos de educación inicial y primaria, completando la totalidad del estudiantado. Ese mismo fin de semana se crearon las aulas virtuales (classroom) de educación inicial, primaria y los que faltaban de secundaria. Rápidamente se organizaron los primeros encuentros (meet) entre docentes y alumnos.

En 48 horas los docentes migraron del manejo de un aula presencial a estar frente a una plataforma, teniendo que resignificar de forma rápida las prácticas y el vínculo con el alumno. Para aquellos educadores que no utilizaban aún este tipo de tecnologías fue un paso "gigantesco". Con acompañamiento desde los diferentes equipos de gestión aprendieron estrategias en el día a día, y no solo innovaron en herramientas para subir, descargar o compartir materiales, sino que también se contempló la dosificación de las tareas, las entregas y los tiempos frente a las pantallas.

Nuevos desafíos

Dentro de los nuevos desafíos que se vienen, se encuentra el lanzamiento de la segunda etapa del proyecto “Un chromebook por estudiante”. En 2021 se implementará esta forma de trabajo en todos los grupos de 5° de primaria a 5° de secundaria y para el año 2022 se cubrirán los grupos que van de 4° de primaria a 6° de secundaria, favoreciendo así una propuesta académica actualizada y acorde al marco de competencias esperadas para un alumno SAFA.

El Colegio y Liceo Sagrada Familia enmarcado en la metodología de PCI (Proyecto de Calidad Integrado) evalúa permanentemente para replanificar y/o reformular su Proyecto Educativo Institucional, es por ello que durante el retorno a clases presenciales consultaron a las familias sobre su trabajo en tiempo de pandemia. Dicha encuesta demostró un amplísimo margen de satisfacción frente a la versatilidad que demostraron para implementar la propuesta pedagógica en tiempos virtuales.

Hoy en día ya existen funcionando equipos de diferentes sectores para acompañar y fortalecer el trabajo docente en esta nueva modalidad, sin descuidar otros aspectos fundamentales del alumno que aspiran formar.

A partir de su Proyecto Educativo Institucional y convencidos de que "la educación debe preparar para la vida", en los últimos años en el colegio se han venido gestando intervenciones que apuntan a desarrollar la educación emocional como innovación psicopedagógica y como parte del currículo académico en todas sus etapas.

"La educación emocional favorece el desarrollo de habilidades imprescindibles dentro el ámbito educativo -pero también para la vida-, habilidades que fomentan la relación entre emoción y cognición, permitiendo así, una mejora sustancial en el desarrollo del individuo para poder adaptarse al medio". Esta competencia hoy es parte fundamental del Proyecto Educativo del Colegio.

Según la institución, el covid-19 "hizo cambiar" al colegio. "Vale la pena destacar que esta necesidad de cambio fue la que activó todo aquello que ya existía de forma latente en nuestra comunidad educativa, reaccionamos frente a una situación límite y lo hicimos de manera más que satisfactoria. Así mismo, este proceso fue transcurriendo de forma comprometida y responsable, tanto en el camino planificado que veníamos realizando como en esa montaña rusa a la que vertiginosamente nos subimos desde la suspensión de clases presenciales", explicaron.

"Venimos trabajando, estudiando, dialogando con otras instituciones del país y del extranjero, definiendo las estrategias que nos parecen más acertadas para adecuarnos a esta nueva didáctica de clase. Reconocemos con humildad que vamos aprendiendo a medida que caminamos, debatimos y discutimos sobre los procesos que se vienen gestando, escuchando a nuestros docentes y alumnos para elaborar proyectos transversales que acompañen las nuevas realidades que nos interpelan en el mundo educativo; sin dejar de lado el proyecto de alumno que anhelamos", agregó el Consejo Directivo.

En el colegio se educa y evangeliza "en un clima de familia, promoviendo y acompañando el proceso de maduración del educando en sus dimensiones personal, comunitaria y trascendente, para la formación de personas íntegras, solidarias y comprometidas con su propio crecimiento y la comunidad".

Este año todos los actores, educadores, directivos, estudiantes y familias tuvieron que adaptarse y transformarse "para aprender". Estamos convencidos de que fue un año de crecimiento. Las encuestas a las familias y educadores evidencian una visión positiva sobre nuestra forma de gestionar la realidad que enfrentamos, defendiendo la educación que propiciamos y el acompañamiento que brindamos".

El Colegio y Liceo Sagrada Familia "tiene la responsabilidad de contribuir en la mejora de la educación uruguaya como lo ha venido haciendo desde su fundación en el año 1889. Hoy en día confiamos en que juntos es posible adaptarnos a esta nueva realidad, juntos es posible seguir trabajando por la educación, juntos es posible estar orgullosos de todo lo que hemos generado".

"Gracias a toda nuestra comunidad que lo hace posible", concluyeron.

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