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Rusia acusa a Ucrania de bombardear campo de prisioneros ucranianos dejando 40 muertos
Mientras el complejo dispositivo para que los barcos ucranianos cargados de trigo se lancen a navegar por el Mar Negro, descomprimiendo algo una guerra que ya lleva más de cinco meses, los combates continúan en Ucrania.
La agencia alemana DW informa que las fuerzas rusas arremetieron contra múltiples sectores del territorio ucraniano. Un ataque en la ciudad Kropyvnytskyi, en el centro del país, dejó al menos cinco personas muertas. Además, la artillería rusa atacó la región de Kiev, donde está la capital, “con seis misiles lanzados desde el mar Negro”, afirma el Ministerio de Defensa ucraniano. También Chernigov, una región al norte del país, sobre la orilla oeste del río Dnieper, fue objeto de ataques de artillería. La semana había sido de relativa tranquilidad, al punto que pueden verse fotos donde los jóvenes participan de fiestas electrónicas o salidas nocturnas al aire libre en la capital ucraniana.
El jueves, la ciudad de Kropyvnytskyi, en el centro de Ucrania, también recibió disparos de la artillería rusa y el gobernador de la región de Kirovohrad, Andriy Raikovych, dijo a la prensa que hubo víctimas. “Muertos y heridos. Veinticinco ya han sido trasladados a instituciones médicas", aseguró.
40 soldados ucranianos muertos
El ejército ruso acusó este viernes a las tropas de Kiev de bombardear durante la noche una cárcel en el Donbás, la zona del este de Ucrania controlada en parte por separatistas prorrusos, causando la muerte de 40 prisioneros de guerra ucranianos.
Según la agencia Sputnik el total de muertos es de 53, de los cuales 40 serían soldados ucranianos tomados prisioneros, mientras que los heridos ascienden a 75. El ataque de artillería fue en un centro penitenciario de Elenovka, al suroeste de Donetsk, donde estaban recluidos prisioneros de guerra.
"Impacto directo en un pabellón de prisioneros", publicó en Telegram el viceministro de Información de la República Popular de Donetsk (RPD), Daniil Bezsónov. El funcionario agregó que en el lugar continúa la operación de desescombro, por lo que "las cifras podrían revisarse al alza".
El ataque al centro penitenciario, según él, fue realizado con un lanzamisiles múltiple Himars, arma que Estados Unidos suministró a Ucrania.
En el mismo sentido se expresó el embajador de la República Popular de Lugansk en Moscú, Rodión Miróshnik. "En Kiev han decidido que la rendición de los militares del batallón Azov' es una vergüenza, y que baja la moral tanto de los ucranianos como de aquellos que patrocinan la guerra. Así que han dado la orden de eliminarlos", opinó el diplomático en su canal de Telegram.
Unas horas antes la provincia de Jersón, que está bajo control de Rusia, volvió a ser un blanco del ataque ucraniano la noche del 28 a 29 de julio, declaró a Sputnik el jefe adjunto de la administración de esa región, Kirill Stremoúsov.
"Las tropas ucranianas abrieron fuego contra la provincia de Jersón la noche del [el 28 de julio], se activó la defensa aérea, los datos sobre posibles víctimas y daños se están aclarando", dijo entonces Stremoúsov.
