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Temblor en el Atlántico: qué hace en estos casos la base uruguaya en la Antártida
Un sismo de 7,6 y con una profundidad intermedia de 63 kilómetros, según la escala sismológica de magnitud de momento (MW), fue registrado este jueves próximo a las Islas Sándwich, al sur del Océano Atlántico y a unos 4.000 kilómetros al norte de la Antártida.
El fuerte movimiento, anunciado por Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), tuvo más de 18 réplicas y sus ondas llegaron a Uruguay, aunque no se percibieron, informó la geóloga Leda Sánchez a El Observador. Tampoco fueron identificadas por los uruguayos de la Base Artigas, pese a que la ubicación es más cercana a las islas.
El epicentro dejó bajas probabilidades de tsunami y ocurrió lejos de las poblaciones, según reportó el sistema de alerta de tsunamis estadounidense. La advertencia repercutió igualmente con "preocupación" en la base uruguaya de la Antártida que debió activar un protocolo de seguridad general para desastres naturales.
"Cuando hay un anuncio de sismo o está ocurriendo uno se pone en práctica el protocolo y se está atento para ver cuál es el grado del sismo y si afecta o no adonde está ubicada la base", informaron desde el Instituto Antártico Uruguayo a El Observador y detallaron que las medidas pueden ser desde permanecer en alerta hasta evacuar la base o demandar su cierre parcial.
En caso de que exista una alerta de tsunami, que hasta este viernes por la mañana no se había notificado, la situación para los uruguayos sería "mucho más grave" porque la base está sobre la costa, explicaron. Durante 2020, como consecuencia de este tipo de advertencias por sismos de 4 a 5,5 de magnitud, los uruguayos se vieron forzados a trasladarse a una zona más alta.
De acuerdo al USGS, el temblor ocurrió sobre la hora 14 en Uruguay y se produjo lejos de la base uruguaya. Sus réplicas oscilaron entre 5 y 5,6 de magnitud.
