El titular de la Asesoría Comercial del MEF prefirió no manejar plazos para cerrar la negociación con China.

Economía y Empresas > ENTREVISTA A JUAN LABRAGA

TLC con China deja un “impacto arriba del 1% sobre el PIB, el empleo y el salario"

Uno de los negociadores del gobierno dice que el proceso se seguirá con “lupa desde San Pablo” y que las empresas uruguayas van a tener que competir más
Tiempo de lectura: -'
20 de agosto de 2022 a las 05:00

El economista Juan Labraga es una de las figuras claves del Poder Ejecutivo en el proceso de negociación que está en curso entre Uruguay y China para la firma de un Tratado de Libre Comercio (TLC). Para conocer detalles sobre el futuro de esa negociación, El Observador habló con el titular de la Asesoría de Política Comercial del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF). Qué mostró un estudio unilateral que hizo Uruguay para cuantificar el impacto que tendría ese tratado con la potencia asiática, lo que se juega China en esa negociación y la mayor competencia con la que tendrán que convivir las empresas uruguayas, fueron algunos de los temas planteados. A continuación, las respuestas de Labraga.

¿En la firma del acuerdo de factibilidad para iniciar una negociación por un TLC con China no debió quedar asentado un memorándum?  Solía pedirlo a otros países. 
No. La contraparte china lo que transmitió es que no firma más ese tipo de memorándum de entendimiento y se va directo al estudio de factibilidad. Eso es bueno aclararlo porque a veces en la traducción del inglés al español se habla de estudio de prefactibilidad como si después tuviera que haber una factibilidad. El próximo paso ya es el inicio de las negociaciones. Entonces, lo que lo que se finalizó es el estudio de factibilidad de un Tratado de Libre Comercio entre Uruguay y China.

¿Y en qué etapa estamos ahora de la negociación? ¿Cómo sigue la parte más logística de esos intercambios?
Ahora lo que hay que aguardar es el inicio formal de las negociaciones. En eso es lo que está hoy el jefe negociador de la cancillería uruguaya con su contraparte china para definir las posibles fechas. Lo que suele ser usual es la negociación de los términos de referencia, es decir, sobre qué se va a negociar. Tenemos realizado un estudio de factibilidad que estableció una serie de capítulos. Ahora, la negociación puede ser sobre los mismos temas o sobre otros que se pueden sumar, para luego sí iniciar la negociación. Por supuesto hay que definir los aspectos más sustanciales de lo que te decía de qué temas negociar hasta los aspectos más logísticos: desde dónde van a ser las reuniones, si van a ser presenciales o virtuales, cuánto tiempo, etc. Todo eso se define en los términos de referencia.

China obviamente es un mercado relevante en bienes para Uruguay, pero qué pasa con otros capítulos como servicios, inversiones, compras públicas, propiedad intelectual, ¿también forman parte del TLC?
Quizás se ha analizado los tratados que China firmó con otros países y quizás se esté tomando como referencia eso. Para China, 10 años es mucho tiempo.  Actualmente, lo que China nos ha planteado —al menos en el estudio de factibilidad—, es un Tratado de Libre Comercio prácticamente de última generación. Es decir, tiene bienes, pero tiene servicios, inversión y propiedad intelectual, compras públicas; tiene todos los capítulos de un acuerdo moderno. Si bien no quedó en el estudio de factibilidad, lo que sí hicimos desde el lado uruguayo —desde la parte técnica en un equipo interministerial donde estaba cancillería, el Ministerio de Economía, el Ministerio de Ganadería, y el Ministerio de Industria— fue un ejercicio de simulación donde corrimos un modelo de equilibrio general computable para el efecto del TLC sobre Uruguay y nos dio un efecto significativo y positivo. 
 
¿Sobre qué variables?
Tanto en el crecimiento del PIB futuro, también un efecto significativo y positivo en empleo y lo mismo con un aumento de los salarios reales. En los tres casos estamos hablando de un impacto de arriba del 1%. Eso lo puedo compartir porque China no quiso que ese ejercicios cuantitativo estuviera en el estudio de factibilidad y no forma parte de lo reservado. 

La Cámara de Industrias realizó un estudio donde identificó, por decirlo de alguna forma, potenciales ganadores y otros amenazados por la firma de un TCL con China. ¿Este estudio que menciona llega a las mismas conclusiones?
Esto es un poco más abarcativo. Hicimos un análisis más general en esta etapa del estudio de factibilidad de la negociación. No nos gusta usar el término ganadores y perdedores porque el partido no se jugó hasta una vez que tengamos algo arriba de la mesa. Por supuesto, si quieres ser más preciso, uno tendría que decir oportunidades y amenazas. Hay sectores que visualizan claras oportunidades en China, aunque todavía no ganaron en el partido porque hay que jugarlo, y hay otros que se sienten más amenazados. Los resultados de este modelo de equilibrio general computable se lo transmitimos a la Cámara de Industrias y coinciden mucho en los resultados con los sectores que identificó esa gremial con metodologías un poco menos complejas.

Uruguay tendrá que hacer algunos deberes internos si es aceptado para ingresar al CPTPP.

En el caso del comercio de bienes, ¿cuál va a ser la estrategia de negociación? Cuotas para productos, rebaja gradual de aranceles ...¿Cuántos productos abarcará?
Para que el acuerdo califique dentro de los estándares de la Organización Mundial de Comercio (OMC), tiene que tener una cobertura del 90% del comercio y 90% de los productos. Así que el 90% del comercio bilateral entre las partes tiene que estar alcanzado por el acuerdo y 90% de los productos de todos los productos, haya o no haya comercio, también; esa es la base. Un primer punto a tener en cuenta es que es verdad que Uruguay negociando solo tiene menos poder de negociación que si fuera el Mercosur. Ahora, cuando negociamos como Mercosur de ese 10% que podemos excluir, imagínate que a Uruguay le quedará un 2,5% como mucho, porque el resto le queda al resto de los países. Ahora, el 10% de las exclusiones son de Uruguay en esta negociación bilateral con China. Después, cómo se incorpora el 90% restante de productos es fruto de la negociación. Hay que ver qué ofrece China y qué ofrece Uruguay. Puede haber desgravaciones arancelarias inmediatas, a más plazos; eso está todo sujeto a la negociación y al intercambio de ofertas de un lado y del otro.

¿Cómo está preparado técnicamente Uruguay para negociar un TLC con una potencia como China que ya tiene una larga experiencia acumulada? ¿No corremos con cierta desventaja y asimetría?
Esa asimetría existe pero Uruguay tiene muy buenos técnicos y profesionales en cancillería y los ministerios de Economía, Ganadería e Industria para negociar este tipo de disciplinas. Por supuesto, Uruguay puede formar dos equipos negociadores en simultáneo y no más; China no sé cuántos técnicos y equipos podrá formar. Los negociadores uruguayos tienen expertise y han negociado este tipo de disciplinas. Que  esos acuerdos después, por cuestiones políticas, no hayan terminado de cristalizarse, es otra cosa. El ejercicio que se hizo en el proceso de negociación entre el Mercosur y la Unión Europea fue una externalidad positiva para los técnicos uruguayos y no tenemos nada que envidiarle a otros países. 

El excanciller Enrique Iglesias consideró que el TLC con China puede ser un piloto para que luego se sumen los otros socios del Mercosur. ¿Ve factible que ello suceda?
Qué va a pasar con los socios del Mercosur coincido contigo que es una discusión hasta geopolítica. Lo que sí es claro es que, desde el punto de vista técnico, Uruguay solo tiene menos margen de negociación que como Mercosur. Ahora, también hay que tener claro y no hay que ser ingenuos, esa negociación los socios del Mercosur la van estar viendo con lupa.  Entonces, qué le permite China a Uruguay y qué no le permite es un antecedente muy importante para el después. Probablemente China quiera tener un efecto demostración y decir: ‘Bueno, negocié con Uruguay y está ahí, desarrollándose. No es que le impuse prácticas anticompetitivas, etc’. China sabe que esta negociación se va a estar viendo con lupa desde San Pablo. 

Estamos en un momento complejo a nivel de la geopolítica mundial. ¿En qué medida Uruguay puede verse perjudicado si avanza con China en su vínculo con EEUU?
Las negociaciones comerciales son cuestiones de largo o de mediano plazo, llevan muchos años. Uruguay a todo nivel, y básicamente al más alto nivel político, le ha planteado a Estados Unidos que el límite lo fija Estados Unidos. ¿Qué quiere Uruguay con Estados Unidos? Todo lo que Estados Unidos quiera que pase. En este momento, por cuestiones no sé si más estratégicas o cuestiones de política doméstica, Estados Unidos no está dispuesto a negociar un Tratado de Libre Comercio con Uruguay y, aparentemente, con ningún país del mundo. Uruguay está dispuesto a iniciar negociaciones con Estados Unidos, lo ha dicho el presidente (Luis Lacalle Pouy), el canciller (Francisco Bustillo) y la ministra de Economía (Azucena Arbeleche) en reiteradas oportunidades.

Un temor que a veces comentan algunos empresarios uruguayos es que las empresas chinas puedan acaparar, por ejemplo, las obras de infraestructura y desplazar a firmas locales que no podrían competir por costos. 
En términos generales, más en un mercado pequeño como Uruguay, este tipo de acuerdos comerciales siempre genera un efecto procompetitivo, vienen nuevos actores y eso es bueno para la economía. ¿Eso le duele al que está instalado? Sí, por supuesto, porque la competencia genera mayor eficiencia y es parte de lo que se busca con estos acuerdos: generar efectos procompetitivos. ¿Cuál es la discusión con China o con cualquier país? Que esa competencia sea en términos leales y que sea justa. De eso hay que encargarse vía las reglas de juego que se establecen. De hecho cuando uno analiza las inversiones en el exterior de China, Uruguay ni entra en consideración prácticamente; ha recibido muy poca inversión extranjera directa china. Después se puede especular por qué. En Uruguay, los procesos licitatorios de las obras de infraestructuras que vos me planteas son todos procesos abiertos, públicos, y se compite. Esas son las reglas de juego de Uruguay y no lo va a cambiar por ningún acuerdo comercial. 

¿Qué tiempo se puede proyectar para la finalización de las negociaciones con China? ¿En 2023?
Hay que ser muy cautos. Desde el lado uruguayo, nunca se pusieron fechas al proceso. Las fechas que se hicieron públicas y que transmitió el propio presidente de la República fueron puestas por la contraparte China para la finalización del proceso de factibilidad. Después esos plazos se estiraron un poco más de lo previsto. Estamos para acelerar al máximo y  disponibles para trabajar y buscar que esto sea lo más rápido posible, pero ¿poner un plazo hoy? Hay que ser más cautos.

La firma del TLC con Singapur es un paso importante para ingresar al sudeste asiático.

Uruguay pregona una discurso aperturista para su comercio de bienes pero también tiene su proteccionismo para las importaciones con aranceles elevados en la comparación internacional que luego termina recayendo sobre las empresas y consumidores. 
Comparto el diagnóstico. Uruguay tiene muchos sectores muy cerrados al comercio internacional, con medidas arancelarias y no arancelarias. Más allá de las agendas de los acuerdos, que es lo que vende y lo que la gente comenta, hay una agenda unilateral de Uruguay que es la de facilitación del comercio. Ahí tenemos unas reuniones de trabajo estructuradas, por ejemplo, con la Unión de Exportadores, pero también con la Cámara de Comercio y Servicios para ver cómo abrir más la economía y facilitar más el comercio. 

El Mercosur cerró un acuerdo con Singapur y también Uruguay, por su lado, anunció su adhesión al Acuerdo Transpacífico (CPTPP). ¿Cómo tomó esas movidas?
Como gesto político de poner un pie en Asia, el acuerdo del Mercosur con Singapur es clave. No es que el mercado de Singapur sea particularmente atractivo, pero sí es un ejemplo de desarrollo y un hub regional en la región del sudeste asiático donde está el futuro del consumo de alimentos de calidad. Sin dudas hay que apuntar ahí. La prioridad de Uruguay es cualquier país en esa zona; en los socios del Mercosur parece no haber mucho apetito de avanzar con esa zona, hay que buscar la forma bilateral. El presidente de la República anunció en el almuerzo de la Unión de Exportadores la adhesión de Uruguay al CPTPP (Acuerdo Transpacífico) sin EEUU. Ahí te da acceso a todos esos países del sudeste asiático. Eso lo que tiene es un proceso de adhesión, que es bien distinto a una negociación. Cuando uno va a adherir algo, tiene que solicitar adherir y cuando te dicen ok, te marcan las disciplinas que tenés que cumplir. Ahí tenés que desarrollar tus cambios legislativos o a través de decretos o el instrumento legal que sea necesario para adaptarse a esas disciplinas. 

¿Se midió ese impacto? 
En el Ministerio de Economía tenemos hecha una evaluación y en cancillería también. Nos consta que la cancillería está solicitando informes al respecto a algunas universidades. En el Ministerio de Economía tenemos una evaluación hecha y tiene un impacto muy positivo para Uruguay.  Esto no implica que es un club muy exigente en materia de disciplinas regulatorias. Hay normativa actual en Uruguay que tiene bastante distancia con el estándar que nos van a exigir para ingresar al CPTPP. 

Turquía y la Unión Europea 

El cierre del TLC entre el Mercosur con la UE a depende de la voluntad política del viejo continente. “Por ahora, solo se han recibido comentarios sobre la idea de avanzar”, dijo Labraga, tras las insinuaciones sobre un acercamiento tras la guerra entre Rusia y Ucrania. 

Con Turquía se está avanzando con el estudio de factibilidad. En este caso, es “menos abarcativo” que con China y no incluye a las inversiones en su arranque . 

Perfil

Es licenciado en Economía por la Udelar, magíster en economía internacional y  catedrático de Comercio Internacional en la ORT. Está al frente de la Asesoría Política  Comercial del MEF desde 2016. Previamente, fue asesor de la Comisión Interministerial para Asuntos del Comercio Exterior de la cancillería y de la OPP.

    Comentarios

    Registrate gratis y seguí navegando.

    ¿Ya estás registrado? iniciá sesión aquí.

    Pasá de informarte a formar tu opinión.

    Suscribite desde US$ 345 / mes

    Elegí tu plan

    Estás por alcanzar el límite de notas.

    Suscribite ahora a

    Te quedan 3 notas gratuitas.

    Accedé ilimitado desde US$ 345 / mes

    Esta es tu última nota gratuita.

    Se parte de desde US$ 345 / mes

    Alcanzaste el límite de notas gratuitas.

    Elegí tu plan y accedé sin límites.

    Ver planes

    Contenido exclusivo de

    Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.

    Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá

    Cargando...