Roberto Cava De Feo
El comportamiento en la vida cotidiana > El comportamiento
Un nuevo encuentro
Pascua fue en abril y también recordamos entonces a nuestros “33 orientales”. Junto a fechas que unidas no pueden dejar de maravillarnos. También, en ese mes, una compatriota, la
soprano María José Siri, cantó espléndidamente junto a Plácido Domingo en el Colón porteño. A las puertas de mayo, como es habitual me detendré en unos temas de comportamiento en lo cotidiano.
Antiguamente no se conocía un lugar propio para comer. De allí viene el “poner la mesa”. Se la llevaba de un sitio a otro de acuerdo a las necesidades. Se ponía la mesa en una sala, en un lugar protegido, debajo de un árbol. Hasta allí se llevaba la mesa con todos los elementos necesarios para una comida.
Actualmente he podido leer algunas notas. En inglés se dice “to lay a table”, es decir colocar los elementos necesarios para comer. Se sobreentiende que nos encontraremos con un sitio denominado “comedor” que dispone de una mesa.
Los cubiertos tienen un orden propio de colocación. Por eso el cuchillo se pondrá a la derecha con el filo mirando hacia el plato. Este detalle tiene su historia. En tiempos muy lejanos cuando un comensal deseaba manifestar su desagrado o enojo con su vecino de mesa, tomaba el cuchillo y lo colocaba con el filo apuntando a su vecino. Con ojos de historiador esa posición permitía con una rápida maniobra, podría agredir seriamente al vecino.
He observado hace unos días, en una publicación británica, en internet, un detalle práctico para establecer la distancia de los cubiertos con respecto al borde de la mesa. Con mucho
sentido práctico se aconseja colocar la mitad frontal del dedo pulgar (1/2 pulgada) en el borde de la mesa apuntando al centro de la misma para que sirva de referencia.
Nos reencontraremos, el mes que viene, en este espacio denominado “el comportamiento en la vida cotidiana”.
