“Aunque Uruguay ha gestionado particularmente bien la crisis sanitaria, es una pequeña economía abierta muy dependiente de lo que ocurra en el resto del mundo, y por lo tanto se va a ver afectada, en la medida que esa crisis va a suponer un importante shock de demanda externa”, expresó este martes el responsable de análisis económico de BBVA Rafael Doménech, en una conferencia virtual que tuvo como eje central la coyuntura económica y financiera global.
El experto abrió su presentación haciendo foco en la evolución que está teniendo la epidemia de coronavirus en el mundo, y trazó tres tipos de modelos bien diferenciados en la actualidad: uno de erradicación en algunos países como China y otros del sureste asiático; una segunda estrategia que es la elegida por Europa de convivir con una pandemia controlada, y un tercer patrón que incluye a países como Estados Unidos y regiones de América Latina donde el número de afectados sigue creciendo.
Además, subrayó que los períodos de confinamiento que han provocado la mayor parte de la contracción económica han sido más intensos en términos de reducir la capacidad productiva, de lo que se esperaba inicialmente.
Doménech puntualizó que si bien en muchas economías la actividad está en recuperación y ya está lejos el fondo que se tocó en meses como abril y mayo, esa recuperación es todavía incierta. El principal riesgo sigue siendo el sanitario porque no se sabe cuándo se va a disponer de una vacuna o si habrá o no un rebrote generalizado.
“Esperamos una recuperación en V asimétrica, incompleta, con una recuperación más lenta y heterogénea entre sectores y países, y con incertidumbres todavía elevadas. La crisis sanitaria en buena parte de las economías va a permanecer bajo control y no habrá un contagio generalizado que dé lugar a un confinamiento estricto”, dijo.
El banco proyecta este año una caída de 4% en EEUU, con recuperación de 5% el año próximo. China crecerá 1% este año y 4,5% el próximo. La eurozona caería dentro de un rango de entre 7% y 11%, con recuperación entre 3,5% y 7,5% en 2021.
En el caso de Argentina, la economía caería 14% en 2020 y se recuperaría 5% en 2021. Para Brasil que es hoy el foco de la epidemia en la región la previsión de referencia es la que realiza el Fondo Monetaria Internacional, que el mes pasado proyectó una contracción de 9,1% en 2020
En particular, los especialistas del banco coincidieron que aun en un escenario económico difícil, Asia está en las primeras fases de consumo, lo que supone hacia adelante una demanda creciente para productos del agro que Uruguay exporta.
En relación al entorno económico, Doménech destacó la actuación “rápida y contundente” que han tenido los grandes bancos centrales del mundo y que ha conseguido mantener a los mercados financieros en situación de cuasi normalidad. “En el conjunto de la economía mundial las tensiones financieras no son comparables con las que vivimos en el período de la gran recesión”, apuntó. “Pensamos que lo peor ha pasado”, añadió.
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