El Ministerio de Transporte retoma el tema luego de intentos frustrados en los dos períodos anteriores
Transporte de carga
Foto: Camilo dos SantosEl gobierno pretende instaurar un nuevo sistema de control para el transporte de carga luego de intentos fallidos durante las dos últimas administraciones. La propuesta incluye el registro de datos laborales que genera algunas dudas en los propietarios de los vehículos.
Primero fue el Sistema Integral de Control de Transporte de Carga (Sictrac) y después el Sistema de Gestión de Flota (Sigeflot). Los dos proyectos buscaron instalar un “Gran Hermano” para el transporte de carga, pero fracasaron por diferentes circunstancias.
Ahora, el actual gobierno busca avanzar en otra propuesta con el objetivo de regularizar la actividad. Para eso, Lucía Etcheverry (ministra de Transporte), Felipe Martín (director nacional de Transporte) y Ernesto Toledo (asesor del ministerio) se reunieron con representantes de la Intergremial de Transporte Profesional de Carga (ITPC), para comentar los detalles de la propuesta a los propietarios de los vehículos.
La idea se centra en tres pilares, según informó a El Observador el presidente de la ITPC, Ignacio Asumendi.
El primero apunta a la trazabilidad del sector a través de una guía de carga. En ese documento electrónico se incluirán datos sobre el tipo de carga, el peso, el recorrido del viaje e información del vehículo y del propietario. A diferencia del último intento (Sigeflot) se añadirán los datos del chofer.
El segundo pilar es el control de esa guía de carga a través de GPS, algo que sí se pretendió en el anterior proyecto. El tercero es un sistema de identificación del chofer por medio de huella digital. Con ese control se podrá establecer con exactitud la jornada laboral del camionero. En su momento, el Sictrac había planteado algún tipo de control sobre este último punto.
A diferencia de las dos iniciativas anteriores, el nuevo sistema todavía no tiene nombre. Pero en las reuniones realizadas, los representantes del gobierno dejaron en claro su intención de avanzar en este proyecto durante los próximos meses, más allá que todavía no está plasmado en un documento formal.
Los propietarios observaron el planteo como una oportunidad para dotar al transporte de carga de una trazabilidad necesaria. Pero las dudas se generan en los aspectos de control laboral.
Asumendi comentó que algunas empresas fijan -en acuerdo con trabajador- un jornal por viaje y después pagan el tiempo extra (horas de espera) con un porcentaje del valor del flete. Otra manera es abonar por la cantidad de kilómetros realizados.
“Las empresas lo hacen para descalzarse de un sistema rígido. Pero muchas veces, esas formas no están incluidas en la letra chica de los convenios colectivos y perfectamente pueden ser impugnables desde el punto de vista legal”, señaló.
Entonces, el control laboral dejaría expuestas esas formas de pago y también la cantidad de horas que el chofer estuvo arriba del camión. Y eso plantea otro inconveniente. “Los transportistas no tenemos la certeza de que vamos a poder cobrar a los clientes las horas de espera (de la carga), que es uno de los grandes problemas que tiene la cadena logística”, expuso Asumendi.
En paralelo, el gobierno comenzó a trabajar en las tarifas de referencia del transporte de carga, que son actualizadas por el Ministerio de Transporte. “Quiere trabajar en la formación de precios. Pero el precio de referencia es justamente eso; no obliga a nadie a cobrarlo o a pagarlo. Entonces, el mercado funciona por oferta y demanda”, indicó Asumendi.
Tras las reuniones, los transportistas convocaron a una asamblea de empresas asociadas e incluyeron a otras gremiales que no forman parte de la ITPC con el objetivo de tratar el tema.
En ese encuentro, los propietarios coincidieron en la necesidad de mejorar los controles y la reglamentación del sector, apuntando a un fortalecimiento y profesionalización del transporte de carga. A su vez, según un comunicado de ITPC, entendieron que para que el nuevo sistema sea aplicable y efectivo, debe estar basado en una mirada integral del transporte de carga, contemplando sus múltiples y diversas realidades y desafíos.
Además, se acordó que las gremiales continuarán el diálogo para luego trasladar una respuesta conjunta, con opiniones y comentarios, al MTOP.
El Sictrac comenzó a funcionar el 1º de agosto de 2018. El objetivo del sistema fue realizar un seguimiento y control más eficiente y eficaz de la regularidad y formalidad del transporte de carga a través de medios tecnológicos. Para eso, se estableció la utilización de unidades de monitoreo electrónico (GPS) instalados en los camiones.
Sin embargo, el 1º de abril de 2020, un mes después de la asunción del gobierno de Lacalle Pou, el Sictrac fue suspendido tras múltiples polémicas y denuncias judiciales por irregularidades en el proceso de implementación.
Entonces, llegó el turno del Sigeflot, creado en agosto de 2024. Tenía como objetivo recabar información sobre la geolocalización de los vehículos de transporte de carga y la identificación y el recorrido de los camiones.
También llevaría un registro de las declaraciones juradas que deberían realizar los transportistas. El anterior gobierno buscó que el Sigeflot se convirtiera en una herramienta para la planificación, optimización y control del transporte de carga. Pese a esa intención, el sistema nunca fue implementado.