La bolsa de Nueva York terminó en fuerte baja este viernes, golpeada por el informe de empleo en Estados Unidos que aumentó los temores de recesión.
Esto desató una explosión de ventas de acciones para tomar refugio en instrumentos de deuda.
Al cierre de Wall Street, el Nasdaq Composite perdió 2,55%, el S&P 500 bajó 1,73% y el Dow Jones retrocedió 1,01%.
El S&P acumuló una caída de 4,31% en cinco días -los cuatro últimos en rojo-, lo que implica su peor semana desde el 10 de marzo de 2023.
Las plazas europeas también cayeron, profundizando sus pérdidas de la semana.
La hora de actuar
Publicadas esta mañana, las nóminas no agrícolas de agosto fueron menores de lo esperado (142 mil versus 165 mil), con una revisión neta negativa de 86 mil nóminas en dos meses.
"Los datos de empleo no cumplieron con las estimaciones, lo que mantiene muy presentes los temores de recesión", escribió el analista de mercados de Oanda, Zain Vawda. "En cuanto a los resultados semanales, la renta variable estadounidense ha continuado su mala racha de setiembre, tal y como sugiere la estacionalidad histórica", apuntó.
El flujo de noticias no se quedó ahí. "Creo que nuestra paciencia durante los últimos 18 meses nos ha servido de mucho. Pero la actual serie de datos ya no exige paciencia, sino acción", dijo el gobernador Christopher Waller de la Reserva Federal en declaraciones preparadas para un discurso en Indiana.
El rendimiento del Tesoro a dos años se hundió a mínimos desde setiembre de 2022 y el petróleo Brent amenazaba con perder los US$ 70 por barril.
Los comentarios alimentaron la especulación de que la Fed inicie su ciclo de relajación monetaria este mes con un gran recorte de 50 puntos base (pb). Si bien más tarde esas apuestas se moderaron, los operadores de futuros siguen descontando un 30% de probabilidad de que ocurra.
Fuente: Diario Financiero y AFP