El expresidente José Mujica fue internado este sábado de mañana, después de atorarse mientras comía. Sin embargo, para las primeras horas de la tarde, ya había vuelto a su casa, según dijo a El Observador su médica personal Raquel Pannone.
La información de que Mujica había sido hospitalizado fue dada en primer lugar por el periodista Martín Riveiro.
Mujica ya había sido internado el pasado lunes 26. Según detallaron fuentes del MPP, el líder del sector había estado en el hospital la semana anterior y se había retirado a su casa con suero el viernes. Debió volver a ser internado porque no pudieron seguir pasándole suero, ya que no le encontraban la vena. Desde su sector indicaron que Mujica tiene problemas en las venas por la vasculitis que sufre hace años.
Sin embargo, el martes 27 ya fue dado de alta y participó de la presentación de Blanca Rodríguez en La Huella de Seregni. "Para mí hoy ha sido un día pesado. Ando remontando mis huesos como puedo. Pero tenía que estar", dijo.
Este martes, Pannone dio más detalles del estado de Mujica, quien anunció a fines de abril que le detectaron un tumor en el esófago.
"La situación es que tiene una patología renal y que las consecuencias de la radioterapia generaron que le cueste más alimentarse y ha tomado menos liquido", explicó la médica.
Según la Pannone, la situación renal de Mujica "se deterioró" y los médicos le indicaron "suero". Este tratamiento lo estuvo haciendo en su casa, pero se volvió dificultoso ponerle la vía por el "pobre caudal venoso" debido a la edad y patología.
"Los estudios mostrarán si la función renal empezó a mejorar con estos días de suero o que seguimos en la misma situación con más días de suero", sostuvo.
El 21 de junio, Pannone había contado que Mujica terminó el tratamiento.
Sobre la condición física de Mujica, la médica dijo este martes que "está frágil" porque "tiene casi 90 años" y "patologías de base". "Si logramos que tome agua y que se recupere va a estar mejor", aseguró.
Sobre el cáncer de esófago que le fue diagnosticado, la médica dijo: "Tenemos fuertes convicciones, que el cáncer se curó, no tiene más. Le hicimos varias tomografías y eso muestra que no hay evidencia del tumor, sí tiene fibrosis que queda por la radioterapia". "Tenemos que lograr que el tejido se recupere. A los 90 años todo es más lento".
"Bajó de peso porque ha disminuido su actividad y no venía comiendo lo que comía antes. No está en sus mejores momentos (de ánimo) pero comprende las opciones que le damos", agregó. "Los riñones vienen funcionando poco, cada vez menos", sostuvo.