La Policía continúa investigando el homicidio de Joel Rodríguez, el oficial de la Guardia Republicana de 35 años asesinado el pasado viernes en la noche en Punta Gorda, por delincuentes que robaron la moto en la que circulaba y sus pertenencias.
El funcionario policial fue baleado en la cabeza sobre las 19:00 horas del viernes en el barrio Punta Gorda y fue trasladado al Hospital de Clínicas, donde falleció este sábado.
Fuentes policiales confirmaron a El Observador que Rodríguez fue abordado por seis delincuentes que llegaron a la zona en tres motos, en lo que investigan como un posible "robo piraña".
El oficial estaba en una moto de alta cilindrada de su propiedad, que fue recuperada en unos allanamientos en busca de pruebas sobre el homicidio en el barrio La Cruz de Carrasco junto a otro vehículo de este tipo. Las autoridades continúan buscando a los implicados en el crimen.
En distintos comentarios de las redes sociales varias personas destacaban que Joel amaba las motos. Carlos Piedra, presidente de la Unión de Policías de la Guardia Republicana (Unipolgr), dijo a El Observador que el funcionario fallecido era un sargento de la Guardia destacado por sus compañeros como una "tremenda persona".
Joel, que tenía dos hijos, también fue recordado por amigos y vecinos que se comunicaron con el sindicato para tener más información de lo sucedido. "Era un gran hombre, trabajador, compañero, responsable y guerrero", destacó un amigo del guardia.
Rodríguez era negociador de la Guardia Republicana desde 2016, integrante de la primera camada de oficiales de esta especialidad egresado de la Policía Nacional.
Un grupo de Facebook de funcionarios de la guardia destacó que en su tarea Joel "trató muchas veces con personas que debió negociar su entrega y lo hizo con éxito, asimismo debió asistir y entrevistar a familiares de quienes estaban en situaciones complejas".