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A más de un mes del pico de consumo, hay marcas que aún escasean en los comercios
Sin ánimo de ser alarmistas, desde el Centro de Almaceneros Minoristas, Baristas, Autoservicistas y Afines del Uruguay (Camabu) aseguran que muchos de los proveedores de productos importados están con faltantes de mercadería, particularmente en los casos de bienes provenientes de Argentina.
El presidente de Cambadu, Antonio Ameijenda, señaló que la gran demanda que hubo durante los primeros días posteriores al 13 de marzo, hizo que no se pudiera recomponer el mercado en su totalidad. Esto ha generado que el abastecimiento de algunas líneas de productos demore más de lo que se suponía lo iba a hacer, explicó Ameijenda.
Según el comerciante, muchos productos y en particular de artículos de limpieza que ingresan desde la vecina orilla -también afectados por una gran demanda interna que tuvo ese país-, no pudieron hacer frente el boom de la demanda puntual que hubo en Uruguay. En el medio, además, transcurrió Semana de Turismo, donde en Argentina se tiene la cultura de cerrar toda la semana.
"Estamos preocupados porque nos están pidiendo contener los precios, pero tenemos listas nuevas (de precios) todos los días”, alertó el presidente de Cambadu.
En la misma línea, el CEO de Grupo Ta-Ta, Christopher Jones confirmó a El Observador que en algunas líneas de producto se están viendo algunos problemas, pero “no es general". El ejecutivo explicó que quizás se puede tener inconvenientes con alguna marca, pero se salvaguarda con otra, por lo que no van a faltar productos. “Dentro de todo no tenés ninguna categoría destruida”, graficó.
Desde que el gobierno declaró el estado de emergencia sanitaria la facturación de los almacenes y autoservicios de cercanía aumentaron en términos globales su facturación un 20%, tendencia que se mantiene a un mes y diez días del anuncio.
En contrapartida, Ameijenda señaló que ha aumentado el consumo de productos nacionales, pero que con el paso del tiempo a medida que los productos importados fueron creciendo, la industria local fue reduciéndose, “y no está preparada para atender una gran demanda”.
En el caso de los supermercados, tuvieron un salto fuerte en las ventas después del 13 de marzo, llegando a facturar hasta el doble que un día normal. A los tres o cuatro días, sin embargo, el consumo se estabilizó y volvió a los niveles normales.
