Como en todo el mundo, en Europa la pandemia ha causado un daño económico y social muy importante. Para este año las proyecciones son que la Unión Europea tendrá una contracción del PBI del 8.7 %, un nivel récord de desempleo y un desequilibrio fiscal de €1.700 millones. Ante esta situación, la atención más inmediata de los mercados financieros se ha concentrado en la debilidad macro económica de los países del sur europeo.