Las incautaciones de cocaína en 2019 registraron una cifra récord ya que pasaron de 754 kilos en 2018 a 12.042 kilos o 12 toneladas el año que cierra. Ha sido un récord absoluto, que incluso había superado casi por cinco veces los 2.459 kilos incautados en 2009, el año más exitoso en la confiscación de esta droga hasta este año, según datos del Ministerio del Interior a los que accedió El Observador.
Ya en el primer semestre, las autoridades destacaban que se había incautado una cantidad de cocaína tres veces superior a la del 2018. Para entonces ya había tenido lugar a comienzos de agosto un operativo en Parque del Plata que permitió capturar el transporte de 872 kilos de la droga, y tras el cual fueron imputados cinco delincuentes.
Pero luego vinieron incautaciones de dimensiones superiores que engrosaron las cifras, como los 3.000 kilos de cocaína confiscados en el puerto de Montevideo el 20 de noviembre, y los episodios de la semana pasada: casi seis toneladas incautadas entre este jueves y el viernes –más de 4.000 kilos en el puerto y más de 1.400 en el establecimiento rural Las Camelias, donde también fue cargada la droga anterior– y 416 kilos que eran trasladados por rutas de Río Negro.
El director de la Brigada Antinarcóticos, Carlos Noria, dijo este lunes a Así Nos Va de radio Carve que en el caso del cargamento de casi seis toneladas se desconoce el origen aunque hay varias hipótesis sobre que puede haber ingresado por vía aérea o vía marítima, por la hidrovía del Río Paraná. Además, dijo que para conocer el origen de la droga faltan estudios de la laboratorio que se están realizando.
Según el director de Aduanas, Jaime Borgiani, el éxito de la operación responde al incremento de los controles que la Dirección Nacional de Aduanas (DNA) comenzó a implementar a mediados de noviembre, luego del escándalo de no haber detectado un cargamento de 4.500 kilos de esta droga, que fue cargada en en Uruguay y descubierta en el puerto de Hamburgo, Alemania, en junio.
Por este caso, fue imputado el empresario Martín Mutio por asistencia al narcotráfico, quien aguarda en prisión mientras espera el juicio oral.
Entre los cambios que se implementaron se dispuso que las gerencias de las áreas de Gestión de Operativa Aduanera y Control y Gestión de Riesgo conformaran un equipo especial de control de operaciones. A ese equipo se le encargó el rol de determinar las acciones de control y coordinar las actividades correspondientes en cualquier momento o etapa del despacho de exportación.
También se dispuso que la unidad de control revisara en forma parcial o total los contenedores o carga suelta, en las que se privilegiara la utilización del escáner como mecanismo de control equivalente a la revisión física de las mercaderías.
Se ajustó asimismo el plazo para registrar el inventario en el depósito portuario al momento de ingresar los contenedores o carga suelta de operaciones de exportaciones. En el depósito, se ordenó que se comprueben a rajatabla todos los precintos puestos en los contenedores u otros medios utilizados para evitar la manipulación indebida cuando la carga haya entrado o esté almacenada dentro del puerto.
En caso que se detecte diferencias entre los precintos instalados y los consignados en el documento de exportación, la resolución indica que se registre el inventario correspondiente, y luego se informe el incidente al equipo de control.
El nuevo reglamento también dicta que todo aquel funcionario que advirtiera cualquier situación anómala, irregular o extraña, debe poner la situación en conocimiento del equipo de control en forma inmediata.
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