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Argentina vota en las elecciones primarias, ensayo de las presidenciales de octubre
Los argentinos votarán este domingo en elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) que servirán como un sondeo nacional para ver cómo están parados los principales contendientes de cara a las presidenciales del 27 de octubre, en las que el liberal Mauricio Macri buscará renovar su mandato en medio de una economía sumida en recesión.
Ideadas para abrir a la participación ciudadana la disputa interna por las candidaturas dentro de los partidos, las primarias funcionan en la práctica como un gran sondeo electoral.
Las PASO se crearon en 2009, se ejecutan el segundo domingo de agosto y determinan qué candidato a la presidencia presentará cada partido político. Sirven además como un filtro ya que las listas que no alcancen el piso de 1,5% de votos válidos son desestimadas.
Son obligatorias para todos los ciudadanos nacidos o nacionalizados argentinos mayores de 18 años. También son abiertas porque no requieren afiliación partidaria y por lo tanto pueden participar en ellas todos los ciudadanos. Son simultáneas porque se celebran en una misma jornada electoral en todo el país, y el voto es obligatorio en Argentina a partir de los 18 años. Desde 2012 los jóvenes de 16 y 17 años pueden votar si lo desean.
En estas elecciones primarias se elige, además de quiénes serán los candidatos a presidente y vice de la Nación, los aspirantes para renovar un tercio de la Cámara de Senadores (24) y la mitad de la de Diputados (130).
¿Cuáles son las fórmulas?
De las diez fórmulas presidenciales que se presentan, dos concitan la atención.
Una es la que integran el presidente de centro-derecha Mauricio Macri y el senador Miguel Ángel Pichetto (peronista de centro-derecha) en el frente Juntos por el Cambio, integrado además por la Unión Cívica Radical.
La otra es la compuesta por Alberto Fernández y Cristina Kirchner como candidata a la vicepresidencia por Frente de Todos (peronista de centro-izquierda).
Otra fórmula que puede terciar en la elección es la que integran el exministro de Economía de Néstor Kirchner, Roberto Lavagna y el gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey (peronista), bajo el nombre Consenso Federal, que intenta captar al votante moderado.
Las primarias se realizarán el domingo 11 de agosto. Las generales se celebrarán el 27 de octubre y la eventual segunda vuelta el 24 de noviembre. El nuevo gobierno asumirá el 10 de diciembre.
Quién gana, quién pierde
Las PASO serán clave para saber si Macri puede ser reelegido pese al deterioro de su imagen debido a la recesión económica, la inflación anual en 40% y el aumento de la pobreza (32%) y el desempleo (10,1%).
Los sondeos coinciden en anticipar que la fórmula Fernández-Fernández será la más votada. "La verdadera incógnita es la distancia entre uno y otro", explica a la AFP el analista político Carlos Fara.
"Como no hay primarias para los (candidatos) presidenciales, a veces se toma la idea de que no sirven para nada, pero son fundamentales por dos razones: la tendencia y el mercado", señaló Fara.
Los mercados financieros "ya han fijado una vara teórica para la derrota (en las primarias) de Macri: por 3 puntos es aceptable, entre 3 y 5 genera dudas sobre si puede ganar en octubre y más de 5 puntos demasiados interrogantes y ésto, al día siguiente, puede volverse un boomerang contra las posibilidades concretas del gobierno", explicó Fara.
En las primarias de 2015, Macri quedó 8 puntos por debajo del candidato oficialista Daniel Scioli (kirchnerismo). En la primera vuelta también fue segundo con 3 puntos de distancia, pero ganó el balotaje.
Macri y Fernández proponen modelos económicos antagónicos y los mercados están a la expectativa de cómo proseguirá el plan de ajuste pactado con el Fondo Monetario Internacional tras las elecciones.
Casi 34 millones de personas están habilitadas para votar. Los primeros resultados se esperan en la noche del domingo.
45, número mágico
Fara sostiene que "el votante de Macri es menos ideologizado, más desinteresado de la política, hasta desinformado" y "el de Fernández es todo lo contrario". Los indecisos no serán una variable fuerte, según analistas.
"Voto a Fernández porque el peronismo siempre se ha preocupado por la justicia social y la soberanía del país", dijo a la AFP Bruno Söllner, pequeño empresario de 58 años. "Voto a Macri porque no quiero volver al pasado corrupto de los 'K'", afirmó Paula Pirotti, vendedora de 43 años, en referencia a los gobiernos del fallecido Néstor Kirchner (2003-2007) y su esposa Cristina (2007-2015).
La extrema polarización hace posible que alguno logre el 45% necesario para ganar en octubre en primera vuelta.
"El que más se acerca es Fernández, y aunque Macri ha crecido desde julio, la semana pasada la distancia era entre 6 y 8 puntos", según la analista Analía del Franco.
En octubre también se puede ganar con 40% y 10 puntos de ventaja con el segundo. Si nadie lo logra, en la segunda vuelta del 24 de noviembre la presa serán los votos del exministro de Economía Roberto Lavagna, un peronista moderado que suma 10% de apoyo, según sondeos.
"Simbólicamente las PASO son un golpe de efecto: quien logre distanciarse por más de 6 puntos se posicionará como ganador", concluyó Del Franco.
Con 12,5 millones de electores, casi 38% del padrón nacional, la provincia de Buenos Aires es clave en la batalla electoral que elegirá además candidatos a gobernador, vice, legisladores, alcaldes y representantes comunales.
