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Casmu derivará a la Justicia auditoría que involucra a Salinas
El Consejo Directivo del Casmu resolvió dar cuenta a la Justicia de presuntas irregularidades cometidas por Daniel Salinas, el ministro de Salud Pública designado, cuando era gerente de Recursos Materiales en la mutualista.
La decisión fue tomada en conjunto con el estudio jurídico que asesora a la institución, después de haber evaluado la auditoría externa que constató la supuesta “negligencia” del neurólogo como uno de los encargados de supervisar la planificación y ejecución de las obras del Hospital de Día y Policlínico Oncológico, situado en donde antes funcionaba el sanatorio número cuatro de la institución, aseguraron a El Observador fuentes del prestador de salud.
En diciembre, el semanario Brecha informó que este centro –inaugurado en setiembre de 2019, a un mes de que Salinas fuera apartado del cargo por el nuevo Consejo Directivo del Casmu–nunca había recibido a un paciente. Además de que su construcción superó el presupuesto previsto y generó pérdidas a la empresa, las fallas edilicias y la imposibilidad de instalar dos campanas para citostáticos, que se utilizan en los tratamientos de quimioterapia, impidieron su debido funcionamiento.
A raíz de esta y otras presuntas irregularidades cometidas entre 2009 y 2019 durante la gestión de Gustavo Bogliaccini, el Consejo Directivo del Casmu que asumió en octubre del año pasado, presidido por Raúl Rodríguez, resolvió abrir investigaciones administrativas y encargar auditorías externas. Con ello se buscó despejar las dudas en torno a algunas compras realizadas durante la presidencia de Bogliaccini, según dijeron.
Como gerente de Recursos Materiales, Salinas estuvo involucrado en al menos cuatro de estos casos que fueron o van a ser auditados. La construcción del Hospital de Día fue uno de ellos y, según las fuentes consultadas, el Consejo Directivo todavía no resolvió si dará cuenta a la Justicia sobre los tres casos restantes, para que allí se dirima si el futuro ministro tuvo responsabilidad civil o penal.
En la auditoría externa a la que accedió El Observador, firmada por el escribano y abogado J.V. Moldes Ruibal, Salinas es señalado como “directo responsable” de las pérdidas económicas que la construcción fallida del Hospital de Día supuso para la institución de asistencia médica.
Del documento se desprende que el neurólogo “no operó los mecanismos necesarios en cuanto al pedido de precios, el análisis comparativo de los mismos y la selección de proveedores, máximo teniendo un Reglamento de Compras que pautaba los procedimientos necesarios”.
Por lo tanto, Moldes Ruibal recomendó la puesta en marcha de “un accionamiento a efectos de determinar el quantum del perjuicio y el consecuente recupero a vía indemnizatoria”. Al argumentar por qué, apuntó contra la “conducta omisa” y “clara responsabilidad” de Salinas y otros funcionarios del Casmu.
El 9 de enero, el Consejo Directivo resolvió entregar la auditoría al estudio jurídico que lo asesora para que estudiara la información disponible y, en función de ello, evaluara si correspondía algún tipo de “accionamiento”. En la resolución consta que de los cinco participantes de la reunión, el único que se abstuvo de acompañar la resolución fue el expresidente Bogliaccini, actual prosecretario de la institución.
Los abogados resolvieron en los últimos días que “la gravedad” de la información –sumado a que Salinas no puede recibir una sanción administrativa porque fue despedido en octubre– ameritaba la intervención de la Justicia.
Al ser consultado por El Observador, Salinas dijo a que no haría comentarios sobre la decisión de dar cuenta a la Justicia porque, al “desconocer la naturaleza de la denuncia”, no estaba “en condiciones de decir nada”. Aun así remarcó su inocencia y dijo que “a su debido tiempo” se encargaría del "tema".
Hasta la tarde de este martes, también el presidente electo Luis Lacalle Pou y los jerarcas del gobierno entrante desconocían la decisión de dar paso a la Justicia adoptada por la institución.
El 12 de diciembre, días antes de que se confirmara la designación del neurólogo, el futuro mandatario le preguntó por las investigaciones administrativas del Casmu en las que estaba involucrado, que ese día habían sido publicadas por el semanario Búsqueda. Salinas contó en rueda de prensa que había llevado “toda la documentación” para transmitirle a Lacalle Pou “la misma tranquilidad” que él sentía.
La construcción del Hospital de Día fue adjudicada de manera directa al estudio de arquitectos Fábrica de Paisajes y superó el presupuesto inicial de US$ 295.041. Según las personas consultadas, la institución gastó cerca de US$ 100.000 más que lo proyectado, teniendo en cuenta los sobrecostos de la ejecución, la necesaria reconstrucción de algunas partes de la obra y la tercerización de los servicios.
El auditor remarcó la importancia de determinar si el estudio de arquitectos y los funcionarios implicados “actuaron de motus propio o a consecuencia de directivas debidamente legitimadas”, que a su entender resultaron en la alteración de la “planificación original”.
Por su parte, Bogliaccini afirmó a El Observador que “no hubo nada irregular” en la construcción del Hospital de Día y que la auditoría externa estuvo a cargo de gente “que no tiene experiencia”.
Según el actual prosecretario del Casmu, “por delicadeza” se abstuvo de votar a favor de que el estudio jurídico resolviera si ameritaba o no dar cuenta a la Justicia, ya que su actuación también fue objeto de la auditoría. El otro jerarca que integra el Consejo Directivo en representación de “Todos por el Casmu”, la corriente minoritaria, votó a favor de ampliar la investigación.
