Este jueves se registraron dos nuevos ataques armados en Ecuador que dejaron cinco personas muertas y un herido, según informaron las autoridades locales.
Tres guardias penitenciarias murieron fuera de una cárcel del puerto de Guayaquil, mientras que dos personas fallecieron y otra resultó herida frente al cercano puerto de Posorja.
El organismo estatal a cargo de las prisiones (SNAI) confirmó a periodista el fallecimiento de las tres guardias -de entre 26 y 31 años- en los "exteriores del Complejo Penitenciario Guayas".
Las mujeres asesinadas el jueves -dos de ellas graduadas hace poco como guías penitenciarias- estaban es un salón de comidas, en el que fueron atacadas por "sicarios", según dijo a la prensa el director general del SNAI, Guillermo Rodríguez.
Sin ahondar en detalles, la policía describió la agresión del jueves contra las tres mujeres como un "ataque armado" y aseguró que sus unidades "han sido desplegadas a fin de dar con los responsables", según un mensaje en Twitter.
En un hecho aparte, sin conexión con lo anterior, la policía informó que también este jueves los ocupantes de una canoa fueron atacados en el mar, frente al puerto de Posorja, con el saldo de dos personas muertas y una herida de gravedad.
Las autoridades ecuatorianas también confirmaron este jueves la captura de tres personas sospechosas de haber estado involucradas en el hecho de violencia que dejó nueve muertos y cuatro heridos en el puerto pesquero artesanal de Esmeraldas.
Dos de los capturados fueron identificado como alías “Chango” y alias "Coco", y serían miembros de la banda Los Tiguerones, según reportaron las autoridades ecuatorianas.
Ecuador afronta una oleada de violencia por una disputa por el poder entre bandas del narcotráfico que usan las cárceles como centros de operaciones.
Los enfrentamientos entre narcos dejan más de 400 presos fallecidos desde 2021, mientras que la tasa de asesinatos a nivel nacional casi se duplicó entre 2021 y 2022, pasando de 14 a 25 por cada 100.000 habitantes, según las autoridades.
Ecuador, ubicado entre Colombia y Perú -principales productores mundiales de cocaína- sostiene una guerra contra el narco, al que le ha decomisado más de 400 toneladas de drogas desde 2021.
Debido a la alta inseguridad se encuentran en estado de excepción, que implica toques de queda y el despliegue de militares a las calles, tres provincias costeras como la de Esmeraldas (cuya capital lleva el mismo nombre) y tres ciudades como Guayaquil, donde la última matanza carcelaria ocurrió el cinco de abril.
(Con información de agencias)
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