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¿Cómo ve Estados Unidos a Uruguay para invertir en 2021?
Estabilidad, poca corrupción y facilidad para transferir los beneficios afuera son algunos de los puntos positivos que la embajada de Estados Unidos ve en Uruguay como destino de inversiones extranjeras. Esto, sumado a una ubicación estratégica en el centro del Mercosur y a las zonas francas hacen de Uruguay un centro de distribución bien localizado para las empresas de Estados Unidos así como también puede ser un país de prueba para los productos estadounidenses gracias a un pequeño mercado de consumidores de altos ingresos.
Estos son algunos de los elementos que destaca el informe sobre clima de inversiones realizado por la embajada y publicado por el Departamento de Estado de Estados Unidos. Este documento, que recolecta la opinión de inversores estadounidenses en los países y es realizado en más de 170 economías, también señala algunas debilidades vinculadas a la regulación laboral y los altos costos.
De todos modos, el informe también señala el crecimiento de China en la zona y en Uruguay en particular y menciona la posibilidad de un posible tratado de libre comercio tanto con el Mercosur como con Uruguay directamente.
“China ha dado señales de apertura para un acuerdo de libre comercio con Uruguay de forma bilateral o con todo el Mercosur”, dice el documento.
El informe destaca que la inversión local y extranjera tuvo un importante aumento entre 2004 y 2014, pero que a partir de 2015 comenzó una caída que no se ha visto revertida a pesar de los incentivos fiscales presentados en 2018 y 2020.
El documento hace referencia a algunas disposiciones de la ley de urgente consideración –a la que llama ley ómnibus- pero no menciona el referéndum que podría llegar a derogar algunos de esos cambios, sobre todo vinculados a la regulación laboral.
La inseguridad en el país también es mencionada como una preocupación para los inversores y destaca que fue un tema central en la campaña de las elecciones de 2019 y que es una prioridad para el actual gobierno. Sin embargo, señala que el “crimen violento está en aumento en Uruguay”.
Las cifras de la mayoría de los delitos han caído en el país, según los datos divulgados por el Ministerio del Interior. Sin embargo, existe la discusión, al igual que en otras partes del mundo, sobre cuál es el impacto de la pandemia en estos números.
Además, recuerda una encuesta realizada por el Ministerio de Economía en 2018 en el que un 25% de los inversores mostraba preocupación por los altos costos laborales, los impuestos, el costo de la energía así como también los sindicatos y los conflictos laborales.
“Los sindicatos son teóricamente independientes del gobierno pero en la práctica tienen una relación cercana con el partido de izquierda Frente Amplio que gobernó el país entre marzo de 2005 y febrero de 2020”, agrega el informe y recuerda que la mayoría de los sindicatos son anticapitalistas y antiimperialistas. También señala que la cantidad de trabajadores sindicalizados pasó de 110 mil en 2003 a 400 mil en 2018, casi un cuarto de los trabajadores empleados.
Uruguay en la OCDE
El informe realizado por la embajada de Estados Unidos también relata los distintos pasos que Uruguay dio para ingresar al Comité de Inversiones de la OCDE (Organización para la Cooperación Económica y el Desarrollo) y destaca que, si bien todavía no es un miembro pleno del organismo, gradualmente ha dado algunos pasos y se ha unido a algunas de sus instituciones.
“La administración del Partido Nacional que asumió en marzo de 2020 todavía no tomó una posición acerca de ser un potencial miembro de la OCDE”, señala.
Trabajadores calificados
El informe agrega que existe una “caída” de la calidad del sistema público de educación y que esto puede limitar el número de trabajadores calificados en el mediano y largo plazo.
“Existe una escasez estructural de trabajadores en el sector de las tecnologías de la información y otras industrias técnicas especializadas”, asegura.
Al mismo tiempo, señala que si bien a nivel mundial muchos puestos de trabajo están presionados por la automatización, en Uruguay un “movimiento sindical agresivo, los altos impuestos y los bajos márgenes de ganancia empresarial” exacerban más aun esta situación.
