Por la disparada del dólar blue tras la salida de Martín Guzmán del Ministerio de Economía, Argentina se vuelve a situar como un país barato para los extranjeros. Y en ese contexto el turismo estético resurge, porque los viajeros acceden a médicos prestigiosos a bajo costo.
En los últimos tres meses se triplicó la demanda. Es que las vacaciones de invierno y la disparada del dólar blue que llegó a superar los 350 pesos argentinos, fueron el combo perfecto para que los extranjeros posen sus ojos en la Argentina. El principal activo del sector es la calidad del servicio y de los profesionales, y los precios que están más baratos que en el mundo.
"Hoy en día y como consecuencia del salto del dólar, los tratamientos de belleza son hasta tres veces más baratos que en los países vecinos", explicó el director médico del centro de estética integral Iobella, Gastón Clemente. "En los últimos tres meses llegó a triplicarse la demanda de tratamiento, sobre todo de aquellos no invasivos", añadió el empresario.
Lo que acostumbran quienes llegan al país vecino es viajar entre cinco y siete días para hacer un combo de tratamientos. Luego continúan con el seguimiento post intervención de forma online, a través de zoom
El público que lidera la demanda es el brasileño seguido por el uruguayo. "No tenemos disponibilidad de acá a los próximos 30 días. Esperábamos que la demanda se viera en baja en las vacaciones, pero no fue así", sostuvo Clemente.
Los tratamientos más demandados son aquellos que no necesitan una recuperación larga ni varias sesiones.
"Hoy está de moda el full face (cara completa, en español), que es una combinación de procedimientos quirúrgicos y no quirúrgicos que se hacen para rejuvenecer y armonizar una cara", dijo el cirujano de la Sociedad Argentina de Cirugía Plástica, Estética y Reparadora, Marcelo Di Maggio.
Además, contó que a nivel corporal los tratamientos con mayor demanda son la lipoaspiración y la liporemodelación tridimensional a nivel abdomen; eso combinado con el botox y la remodelación glútea.
"Los rellenos y los botox que no necesitan recuperación hoy encabezan la demanda de aquellos turistas que llegan al país", sostuvo por su parte Clemente. Entre ellas destaca el relleno de senos, que tiene un precio promedio de US$ 3.000.
"Argentina es un polo de atracción para la cirugía estética”, señaló Di Maggio.
Según el Instituto Nacional de Promoción Turística de Argentina, antes de la pandemia el país estaba en el top cinco de los destinos turísticos médicos de la región. Llegaban alrededor de mil turistas médicos por mes, y las estadías promedio eran aproximadamente cinco veces mayores a las del turismo convencional porque duraban entre tres y seis semanas. Eso se traducía en un ingreso anual promedio de entre US$ 200 millones y US$ 250 millones.
Si bien durante la pandemia no llegaron turistas médicos por el cierre de fronteras, eso ya es parte del pasado y las cirugías estéticas vuelven a captar extranjeros. "La pandemia parece estar terminada y eso hace que muchos extranjeros quieran viajar otra vez. Y Argentina sigue ofreciendo calidad de servicios, porque las clínicas donde se hacen las cirugías y los tratamientos de estética son de primer nivel", concluyó Di Maggio.
Con información de El Cronista - RIPE
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