La presidenta argentina,
Cristina Fernández, rechazó ayer las críticas de la oposición sobre una "campaña sucia" del
kirchnerismo ante la segunda vuelta presidencial y denunció, por el contrario, una "campaña cloaca" en su contra.
"Campaña cloaca es la que sufrió esta presidenta y sufre todos los días esta presidenta", dijo Fernández, en un acto público en el que apareció acompañada, por primera vez desde la primera vuelta electoral del pasado 25 de octubre, por el candidato oficialista a la Presidencia,
Daniel Scioli.
La presidenta se refirió a la segunda vuelta de las presidenciales, que tendrá lugar el 22 de noviembre, como una convocatoria en la que hay que elegir entre dos modelos de país y cargó, sin mencionarla por su nombre, contra la alianza conservadora Cambiemos, que encabeza el candidato presidencial Mauricio Macri, el rival de Scioli en la ronda decisiva.
"Primero fue la campaña del fraude", dijo en alusión a las advertencias de la oposición contra supuestas intentos de fraude en la prima vuelta electoral.
"Cuando los resultados no fueron los que esperaban, fueron un poco más favorables para ellos, se terminó la campaña del fraude", agregó, y comenzó "lo que denominan la campaña sucia".
"Si nosotros repetimos lo que dicen algunos dirigentes, o dijeron, no estamos haciendo campaña sucia, estamos haciendo la campaña más limpia y transparente para que la gente sepa que quiere para su país", añadió.
"Simplemente mostramos lo que hacemos y recordamos lo que hicieron y dijeron", insistió Fernández.
"Campaña cloaca es la que sufrió esta presidenta y sufre todos los días esta presidenta", denunció.
"Me han publicado en algún lugar más de 30 tapas que no tienen que ver con mi gestión, tienen que ver con mi condición de mujer. Desde que soy bipolar, sabiendo que en mi familia tengo una persona muy inteligente que está enferma (...) No soy bipolar", dijo. "Hubo hasta tapas denigrantes donde yo fingía orgasmos por el poder", aseguró.
Fernández denunció "ensañamiento y hostigamiento" a su familia, con "tapas" de diarios, donde a su hijo Máximo "lo acusaban de tener cuentas en el exterior".
"Mentiras, absolutamente todas mentiras, agravios y descalificaciones. Ni siquiera eran campañas sucias, eran campañas cloacas", insistió la mandataria, arropada por parte de su gabinete y por cientos de militantes que aguardaron frente al polo tecnológico donde se desarrolló el acto, en el barrio porteño de Palermo.
Derechos humanos
Metida de lleno en la campaña, la presidenta argentina también atacó a Macri por haber dicho que los derechos humanos "son un curro". "Uno (en alusión a Macri) dijo que los derechos humanos eran un curro. Curro fue el de los grupos económicos cómplices que se enriquecieron con la dictadura (1976-1983) y que desaparecieron a 30 mil argentinos para imponer su plan económico", dijo la mandataria.
Fernández, sentada junto a Scioli y con quien se abrazó al terminar el mensaje, defendió la política del gobierno en favor del desarrollo de la ciencia, que permitió "construir un banco de datos genéticos para encontrar a los nietos arrebatados".
En ese momento del acto de campaña saludó desde la tribuna a Delia Giovanola, una de las fundadoras de Abuelas de Plaza de Mayo, que el jueves logró la restitución de la identidad de su nieto, el 118 de la organización humanitaria. La entidad calcula que 500 bebés fueron robados durante la represión.
Tras los exámenes que comprobaron su filiación de sangre, Martín Ogando Montesano, hijo de un matrimonio secuestrado y desaparecido por militares, llamó a Giovanola por teléfono y le dijo: "Hola abuela, soy tu nieto".
Macri, candidato conservador, había declarado que con él como presidente "se acaban los 'curros' de los derechos humanos".
La campaña oficialista sostiene que Macri, un magnate empresario, está vinculado a sectores que respaldaron el régimen militar y luego al presidente peronista neoliberal Carlos Menem (1983-1989).
Las elecciones marcan el fin de un ciclo de 12 años de kirchnerismo (peronistas de centroizquierda) en el poder, iniciado por el fallecido marido de la jefa de Estado y expresidente Néstor Kirchner.
Kirchner anunció la ampliación del Polo, que permitió repatriar a centenares de científicos y la botadura ayer del primer barco-laboratorio en aguas territoriales, además de la reciente puesta en órbita de dos satélites de fabricación nacional.