Detienen en Bolivia a un sacerdote católico acusado de abusar de seminaristas

Milton Murillo, párroco católico de la Iglesia de San Roque en la sureña región de Tarija, fue enviado a prisión preventiva por tres meses durante una audiencia el jueves por la noche, dijo la fiscal regional Sandra Gutiérrez Salazar.

Este viernes le informó al periodismo que “con esto queremos expresar que el Ministerio Público está tomando medidas severas para garantizar que estos delitos sean sancionados”.

El caso Murillo llegó a un punto crítico en parte debido al escándalo que estalló a principios de este mes sobre el jesuita español Alfonso Pedrajas que murió de cáncer en 2009 y dejó un diario personal en el que confesaba haber abusado de unos 85 menores en Bolivia durante las décadas de 1970 y 1980 en internados católicos, según informó el diario español El País.

La Iglesia Católica y la Compañía de Jesús han pedido perdón y se han comprometido a apoyar las investigaciones que surjan del caso Pedrajas.

Los fiscales pidieron a las víctimas de Pedrajas y otros sacerdotes que testifiquen mientras las autoridades también investigan si hubo algún encubrimiento.

A la conmoción causada por el caso de Pedrajas se sumaron también la semana pasada, ocho denuncias contra sacerdotes de la Compañía de Jesús por abuso sexual, según informó oportunamente el fiscal general del Estado, Juan Lanchipa. Entre los presuntos abusadores hay cuatro españoles ya fallecidos.

Aunque ya había habido denuncias de abuso por parte de Murillo, nuevos testimonios de presuntas víctimas ayudaron para que la fiscalía ordenara su detención.

El gobierno boliviano dijo esta semana que creará una Comisión de la Verdad para investigar las denuncias de abuso sexual contra niños y dijo que impulsará una ley que elimine la prescripción para este tipo de delitos.

“Este horror no se puede repetir; estos delitos, ya sean cometidos por sacerdotes o por cualquier otra persona, no pueden ser objeto de prescripción”, dijo María Nela Prada, ministra de la presidencia de Bolivia.

Un pequeño grupo de personas se reunió frente al palacio arzobispal en el centro de La Paz para exigir justicia por las denuncias de abuso sexual por parte de miembros de la Iglesia.

“Estamos devastados”, dijo una de las manifestantes mientras protestaba. “Sabemos que la Iglesia Católica está encubriendo casos”, afirmó.

Aunque ha habido varias denuncias de pederastia que involucran a sacerdotes en la nación andina, las organizaciones de derechos humanos aseguran que, hasta ahora, pocas han sido debidamente investigadas.

Child Rights International Network, una de las organizaciones que ha trabajado extensamente en casos de pedofilia que involucran a autoridades religiosas, afirmó en un informe de 2019 que solo tres casos resultaron en condenas, incluida la de un sacerdote que fue sentenciado por abusar de 30 niños en un barrio pobre en la localidad rural de la región central de Cochabamba.

(Con información de agencias)