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Los datos de Cuentas Nacionales del segundo trimestre confirmaron que la economía mantuvo su estancamiento, pero logró zafar de la recesión técnica. El PIB creció 0,1% en términos interanuales en el trimestre abril-junio y 0,3% respecto al trimestre anterior, según informó este martes el Banco Central (BCU).
El informe del BCU destacó el impacto positivo en términos interanuales del sector transporte, almacenamiento y comunicaciones (5,5%), que fue contrarrestado por una caída en comercio, reparaciones, restaurantes y hoteles (-2,6%), así como la industria manufacturera (-1,9%). También la construcción cerró con una caída de 4,7% en el segundo trimestre del año respecto a 2018.
Por otro lado, el consumo privado se mantuvo estancado (-0,1%) respecto a igual trimestre del año pasado, mientras que el gasto del gobierno se expandió 0,4%. En tanto, la inversión volvió a mostrar números rojos con una caída de 5,8% en la comparación interanual en abril-junio, con un descenso del sector público del 15,9%, pero más moderado el sector privado (-1%).
Finalmente, las exportaciones se expandieron 3,5% en la comparación interanual y mostraron una incidencia positiva de 1 punto en la actividad del segundo trimestre. En cambio, las importaciones cayeron 0,3%.
PIB del segundo trimestre confirmó que la economía uruguaya sigue estancada, sin cambio en el rango estimado para 2019 (0 a 0,5%). https://t.co/ezj8HRpHjb— Aldo Lema - Uruguay (@AldoLema_uy) September 17, 2019
PIB del segundo trimestre confirmó que la economía uruguaya sigue estancada, sin cambio en el rango estimado para 2019 (0 a 0,5%). https://t.co/ezj8HRpHjb
En el primer tercio del año, la economía uruguaya había caído 0,3% respecto a igual período del año pasado.
En la medición trimestre a trimestre, la actividad local no muestra señales de crecimiento desde el primer cuarto del año pasado. Desde entonces, alternó subas y bajas de la actividad. En términos generales, la literatura académica considera que una economía está en recesión técnica cuando acumula dos trimestres consecutivos de caída. En cambio, otros expertos no comparten ese criterio y se basan en otros indicadores de la economía real para definir si una economía atraviesa un ciclo recesivo o no.
Los datos de cuentas nacionales publicados por el #BCU para el segundo trimestre (2T) muestran que, tal como predijo el ILC, la actividad económica en el 2T de 2019 se expandió un 0,3% respecto al trimestre anterior en términos desestacionalizados. #PBI #ILC #Uruguay #Economia pic.twitter.com/Q8Y6ZcXgQG— CERES (@CERES_UY) September 17, 2019
Los datos de cuentas nacionales publicados por el #BCU para el segundo trimestre (2T) muestran que, tal como predijo el ILC, la actividad económica en el 2T de 2019 se expandió un 0,3% respecto al trimestre anterior en términos desestacionalizados. #PBI #ILC #Uruguay #Economia pic.twitter.com/Q8Y6ZcXgQG
La economía uruguaya estuvo cerca de la recesión durante el tercer trimestre de 2015. En el segundo tercio de ese año el PIB tuvo una contracción interanual del 1,1%, pero luego se estancó en 0% en el siguiente período, para volver a caer 1,3% en el último trimestre del año. Para encontrar una caída del PIB de dos trimestres al hilo hay que remontarse a la crisis del 2002.
En la última la Ley de Rendición de Cuentas del ejercicio 2018, el equipo económico redujo en casi tres puntos porcentuales su estimación de crecimiento para la economía uruguaya respecto a la rendición anterior. El Ministerio de Economía espera que el PIB se expanda 0,7% en 2019.
En una reciente entrevista con Búsqueda, el director de la Asesoría Macroeconómica Christian Daud dijo que esa previsión de 0,7% se mantiene vigente, aunque dejó abierta la puerta a algún ajuste en función de cómo se termina de cerrar la negociación entre Argentina y el Fondo Monetario Internacional (FMI). “Claramente hoy hay alta incertidumbre y no esperamos grandes noticias positivas; un escenario de relativa estabilidad sería compatible con nuestro 0,7%. Pero una mayor volatilidad podría tener algún efecto adicional, en especial sobre el canal del turismo”, reconoció el tres del MEF.
Para el segundo semestre de este año, el Ejecutivo es moderadamente optimista y espera una mejora leve de la actividad en base a la obra del Ferrocarril Central para UPM y obras de infraestructura pública que están en curso.
En tanto, para 2020, el Ejecutivo proyecta que la economía uruguaya acelere su expansión a 2,6%, cuatro décimas por debajo del 3% que había estimado el año pasado.
“En este desempeño previsto (por 2020) juega un rol determinante la instalación en nuestro país de la tercera planta de fabricación de pasta de celulosa de la empresa UPM Kymmene”, explicó el gobierno en la presentación de su última Rendición de Cuentas.
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