La llegada de la pandemia en marzo de 2020 cambió la rutina de los uruguayos y tuvo incidencia en los hábitos de consumo de las personas. Un hecho que no pasó desapercibido fue el cierre de bares y restaurantes. A eso se sumó la suspensión de fiestas y espectáculos públicos. También fueron meses donde las personas pasaron más tiempo en sus casas, hicieron más vida familiar y las salidas fueron contadas.
¿Qué pasó con el consumo de bebidas alcohólicas? Las cifras del año pasado muestran que el vino fue el gran ganador de la pandemia. En tanto, hubo descensos en la demanda de productos como cerveza y whisky.
En el rubro cervezas, entre enero y diciembre de 2020 el consumo totalizó 95,3 millones de litros, y se ubicó un 6,7% por debajo de lo ocurrido en 2019, según los datos de volumen físico comercializados en el mercado local y declarados por fabricantes e importadores ante la Dirección General Impositiva (DGI) para la determinación del Impuesto Específico Interno (Imesi). Tras alcanzar un récord de 108 millones de litros en 2018, el año pasado fue el segundo consecutivo a la baja para la cerveza.
El volumen importado de este producto fue de 32,3 millones litros, mientras que la participación de productos nacionales se ubicó en 63 millones litros. Algo más de tres de cada diez litros degustados por los paladares locales llegó desde el extranjero, en línea con lo que viene sucediendo hace ya varios años.
Para el caso del whisky, el año pasado se pagaron impuestos por 4,7 millones de litros y el volumen declarado fue muy similar al de 2019. En este caso aumentó por cuarto año consecutivo la preferencia por marcas importadas, y volvió a caer el whisky nacional. El consumo de whisky uruguayo totalizó apenas 609 mil litros, y es la cantidad más baja en la serie histórica que publica DGI que se inicia en 1987, según los datos procesados por El Observador.
Mientras la cerveza cayó y el whisky no tuvo grandes cambios, el consumo de vino fue el gran ganador de la pandemia. La venta de esta bebida creció 12% en la comparación interanual.
En 2020, los uruguayos consumieron 7,6 millones de litros más respecto a 2019. El año pasado la venta fue de 72,3 millones de litros, y de 64,7 millones un año antes, según datos del Instituto Nacional de Vitivinicultura (Inavi) que publicó El País.
También se acentuó la preferencia por los vinos de elaboración nacional que fue de casi 97% en línea con años anteriores. El vino en tetra pack fue lo que más se consumió, seguido por el vino en presentación de 10 litros, y el vino en presentación de cinco litros.
El dinamismo del consumo ya se había empezado a observar en la primera mitad de ese año. El crecimiento fue exponencial a partir de marzo, con 32 millones de litros entre enero y junio.
Durante el primer mes de pandemia y ya con las primeras medidas de emergencia sanitaria en el país, el consumo fue de casi 4 millones de litros. Luego en abril trepó a 5 millones de litros, y en mayo llegó a 6 millones de litros. Un mes después, en junio, se alcanzó un pico de 9 millones de litros, más del doble que en marzo. La segunda parte del año mantuvo el dinamismo con ventas que siguieron creciendo.
Otra situación que se apreció el año pasado fue que por un lado se restringió la demanda desde restaurantes, que son un nicho de mercado muy importante para muchas bodegas nacionales exportadoras, pero al mismo tiempo se fortaleció la demanda en canales de venta como supermercados, tiendas y en el ecommerce.
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