Nacional > CONGRESO DE INTENDENTES
El Sucive incorporará patente única para motos a partir de 2022
El Sistema Único de Cobro de Ingresos Vehiculares (Sucive) incorporará a partir del año 2022 una patente única para las motos, según afirmó a El Observador su coordinador, César García. El mecanismo de abono centralizado ya rige para autos y camionetas desde el 2013, que representan la mayor parte de la recaudación por este tributo.
García indicó que la comisión que encabeza el Sucive se reunirá el próximo 1° de junio para comenzar el análisis, que entre otras cosas va a requerir estudiar a la totalidad del parque automotor de modo de saber cuántas patentes aumentarían su monto y cuántas disminuirían.
Además también proyectan incluir en el sistema de patente única a los camiones que no están comprendidos al día de hoy en el Sucive, que son aquellos anteriores al año 2013. Los 0 km durante el 2020 tributan una alícuota de 1,30% sin IVA sobre su valor de mercado, mientras que los comprendidos entre 2013 y 2019 abonan sobre una alícuota de 1,30% sobre el valor del mercado.
Como hoy en día cada intendencia cobra a motos y camiones según sus criterios —y por tanto la recaudación es dispar según cada gobierno departamental— el consejero político del Congreso de Intendentes consideró que el sistema de patente única va a derivar en una inevitable “resignación fiscal”. No obstante, sostuvo que hay consenso en todos los intendentes para implementarlo a partir del año que viene.
El Sucive tendrá tiempo hasta el próximo 31 de octubre para determinar las condiciones, fecha en que la Comisión de Aforos del Congreso de Intendentes decreta año a año los ajustes que corresponden a las distintas patentes.
García adelantó que la postura “más firme” al día de hoy es crear un criterio de franjas fijas por cilindrada. Y, además, el consejero expuso que “seguramente” haya dos bloques: las motos del 2015 hacia atrás y a partir de ese año.
Uno de los focos a atender son las motos de menor cilindrada, que en cuestión de pocos años pierden su valor. Una idea de García es que puedan pagar la patente por sus primeros cinco años de circulación y que “después no paguen nunca más”. En este sentido, manifestó que es más barato comprar una moto nueva que pagar las multas por incumplimiento.
Un ejemplo gráfico es la recaudación percibida por las intendencias en estas categorías: ingresa menos de la mitad de lo que correspondería para las más de un millón de motos registradas por el Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP). Quiere decir que menos de la mitad de las motos en el país están circulando..
Asimetrías del sistema
Los motociclistas Marlene Ferrari y Ariel Grillo se dirigieron en febrero al coordinador del Sucive alegando “severas distorsiones en la evolución de los montos pagados por los contribuyentes”, según consta en la misiva a la que accedió El Observador. Repararon en este sentido en que —a diferencia de las patentes de autos, calculadas mediante alícuotas sobre el valor de mercado— para las motos no se considera el valor de mercado.
Al no estar centralizado el cobro, manifestaron que “para una misma marca, modelo y año, hay tantos valores de patente como gobiernos departamentales”. Para la categoría a la que pertenecen rige un punto de corte en el 2013: las motos anteriores a esa fecha parten de un valor de patente que pagaba el vehículo al cierre del año previo y su importe se ajusta cada año según el IPC; para las posteriores a ese corte, se considera un valor ficto en función de la cilindrada de la moto, ajustado anualmente por IPC.
Como primer argumento, Ferrari y Grillo recurrieron a un ejemplo. Tomaron por un lado el valor de patente real pagada de 2013 a 2021 por un Volkswagen Gol del año 2012, aplicaron el la alícuota, y calcularon el valor de mercado año a año en dólares. Por otro, tomaron una “moto testigo” con un hipotético valor inicial de mercado —el mismo que el auto— que ajustaron año a año por IPC. De este modo pretendieron ver qué pasa con el valor de mercado de los autos según el criterio del Sucive respecto al de las motos (por IPC).
Con este enfoque apuntaron que todas las motos se depreciaron en 9 años un 12,5% de su valor, mientras que los autos lo hicieron casi en un 50%. Además indicaron que en todos los años disminuyó el valor del auto, mientras que el de la moto —ajustado por IPC— llegó a crecer entre 2017 y 2018.
En otro término, con el mismo caso de ejemplo, calcularon la evolución anual del valor de patente para cada uno. “Mientras que para el Volkswagen Gol en el período 2013/2021 el importe efectivamente cobrado por Sucive se incrementó en un 25%, el incremento para todas las motos en el mismo período fue del 90%”, redactaron los motociclistas.
“Cuando baja el precio de mercado y el dólar mantiene cierta estabilidad, tal que no compensa la caída del precio en dólares, disminuye el aforo de un vehículo. Si se mantiene constante la alícuota, el valor de la patente se reduce”, analizaron respecto a la caída de 2017-2018. “En efecto, mientras que la patente del auto fue de $ 18.186 en 2017, en 2018 cae a $ 16.947 y en 2019 cae nuevamente a $ 16.590”.
Los motociclistas también apuntaron contra la antigüedad. “En la práctica, se da que mientras un auto con una antigüedad superior a los 45 años está exonerado del pago de patente de rodados, las motos siempre pagan”, reclamaron.
Por ejemplo, una moto Vespa con casi 60 años de antigüedad en Montevideo, Paysandú y Maldonado abona una patente de rodados por encima de los $400 y en el caso de Maldonado más de $800.
“Por lo tanto, urge unificar la tabla de fictos de patente de rodados a nivel nacional de los vehículos categoría C, pues en la actualidad, para una misma moto hay al menos 19 valores de patente diferentes, según el departamento donde se empadrone el vehículo”, concluyeron en la misiva.
"Corralito" por antigüedad
Enrique Tucci maneja una Kawasaki Vulcan 1700 del año 2012, pero que fue empadronada en 2018. Como cualquier moto en circulación en la capital, debe tributar la patente de rodados ante la Intendencia Municipal de Montevideo (IMM). Por ser del 2012, este año debería abonar un total de $46.175 —precio global que no considera bonificación por pago al contado—. Sin embargo, al mismo modelo 0 km pero del 2013 —un año más nueva que la suya— le correspondería pagar $19.486. Es decir, un costo que sería menos de la mitad.
Tucci presentó un reclamo a la comuna capitalina a comienzos de año, a lo que le respondieron que “el valor patente es correcto”, correspondiendo el ajuste de la suma según el IPC del año anterior. El conductor volvió a protestar y esta vez señaló que desde 2018 —fecha de empadronamiento— lleva pagado un sobrecosto de $50.554, con base en las referencias de la intendencia proporcionadas luego de un pedido de acceso a la información pública que realizó.
La administración de Carolina Cosse contestó que los valores de la tabla citada por Tucci en su segundo reclamo regían para las motos de 2013 en adelante. “Las motos de 2012 para atrás no utilizan el mismo criterio de la relación cilindrada-año, sino que se toma el valor patente que le correspondió abonar o le hubiera correspondido abonar al 31 de diciembre de 2012, y luego ese valor va aumentando en base al IPC de cada año”, redactó la comuna, según consta en los documentos a los que accedió El Observador.
Así, el hombre paga el doble de patente de la que le correspondería abonar si la moto —misma marca y cilindrada— fuera del 2013, en lugar de ser del año previo.
