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Empezaron las pruebas del Censo 2023: ¿en qué consiste y qué se pregunta?
El Instituto Nacional de Estadística (INE) empezó las pruebas del Censo 2023, una instancia que servirá de “ensayo general” de cara al relevamiento que se hará desde abril del año que viene, afirmó el director del organismo, Diego Aboal.
Esta primera etapa consiste en “probar el despliegue en campo”. En concreto, se verificarán que los contadores de UTE estén bien asociados con las direcciones de los hogares correspondientes. Además, los técnicos están chequeando los mapas que han sido elaborados en el INE con lo que se encuentran en la realidad.
“El objetivo es corregir esa información de escritorio en caso de que no sea la correcta y llegar a una información adecuada para que luego los censistas se ubiquen en el territorio”, dijo Aboal, según consignó el portal de Presidencia.
De esta manera, a partir del 17 de este mes se abrirá un formulario web para que los hogares seleccionados completen a modo de recabar la información correspondiente a este censo experimental. Una semana más tarde, los censistas acudirán de forma presencial a las viviendas; en aquellas en que se haya llenado ese formulario se les pedirá a las personas un código correspondiente, mientras que a quienes no lo hayan completado se les censará en el momento para obtener la información.
¿Cuántos hogares comprende y qué se pregunta?
Esta etapa experimental, que se desarrollará durante octubre y noviembre, alcanzará a “varios miles” de viviendas a través de cuatro departamentos.
En ese sentido, se censará en: Lagomar (Canelones); los barrios de Cerrito, Las Acacias, Carrasco, La Teja, Pocitos y La Comercial (Montevideo); Guichón, Piñera y Beisso (Paysandú), y Minas de Corrales (Rivera).
Estas zonas fueron elegidas “por sus características particulares”, ya que para el INE “son representativas de la población nacional”.
Por otro lado, Aboal detalló qué tipo de información se recaba acerca de las personas: su edad, sexo, nivel educativo, qué ocupación tienen y “elementos vinculados a la discapacidad”. Aboal acotó que, en lo que respecta a la profesión, el censo no pregunta sobre ingresos.
En tanto, también se consulta por datos sobre las viviendas: “Su estado, qué tipos de techo tienen, características del piso (si es de tierra o no), si tiene conexión a electricidad, agua, saneamiento, qué equipamientos y elementos electrónicos tiene…”, enumeró el director del instituto.
Asimismo, el cuestionario incluirá algunas nuevas preguntas en comparación con la edición anterior del censo. Entre estas novedades se encuentra la solicitud de la cédula —para evitar duplicaciones durante el censo web—, una pregunta vinculada a la identidad de género, otra sobre la tenencia de mascotas en el hogar y si la vivienda fue afectada por algún desastre natural, de acuerdo con un comunicado difundido por el organismo.
Ensayo y error
De esta manera, Aboal señaló que esta instancia es “una de las pruebas más importantes” del INE de cara al censo nacional, que se realizará entre abril y mayo de 2023.
“El objetivo es probar todo el dispositivo y, eventualmente, corregir aquellos elementos que no han funcionado bien […] Este es el ensayo que va a hacer que corrijamos muchos de los sistemas y del dispositivo que estamos implementando en el campo”, explicó.
Así, indicó que el Censo 2023 funcionará de manera similar a esta prueba: en las primeras semanas de abril se abrirá el formulario web para que cada hogar lo complete con la información correspondiente. Estará abierto “durante unas dos o tres semanas”; luego, cuando se cierre esta etapa, saldrán los censistas puerta a puerta a levantar el código del formulario completo o, si no se completó, cuestionar con una tablet en el momento.
Esos datos censados luego serán “clave” para la realización de políticas públicas durante 10 años, argumentó Aboal. “Decidir dónde abrimos otro CAIF, una escuela, una policlínica... Esta información es muy rica [y] nos va a brindar una imagen muy nítida” del país, apuntó.
