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Façoneros aceptan rebaja de pago propuesta por Granja Tres Arroyos
Hicieron contrapropuesta para que haya menos productores desvinculados
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12 de mayo de 2016 a las 05:00
Un grupo de façoneros que producen para la avícola Granja Tres Arroyos decidió aceptar una rebaja en el precio que cobran por su producción y, al mismo tiempo, renunciar a parte del incremento productivo que se les propuso como compensación, de modo que en el marco del reordenamiento productivo que activó la empresa haya menos productores desafectados.
Granja Tres Arroyos estaba trabajando con 70 façoneros y seleccionó a 31 –los más eficientes en la gestión, a su criterio– y les propuso activar una rebaja de un 10% en el pago, pero a la vez incrementar su actividad productiva para ayudarlos.
Los productores, reunidos esta semana, aceptaron la rebaja, pero con relación al segundo punto decidieron elevar una contrapropuesta a la empresa avícola.
Esta consiste en que renuncian a parte del incremento productivo que se les propuso para destinar eso a que el número de façoneros desvinculados de esta cadena agroindustrial sea menor al originalmente previsto.
Se pretende que alrededor de 10 de los 39 que iban a quedar sin vínculo puedan mantenerlo.
Los 31 elegidos por Granja Tres Arroyos para seguir activos en principio iban a ascender a un volumen productivo de 5,5 crías al año, pero propusieron renunciar a media cría cada uno y destinar eso a otros façoneros que en principio habían quedado de lado.
Renunciar a media crianza por año implica un espacio productivo de 20.000 m2 de galpón, equivalente a 1 millón de pollos por año, volumen productivo que podría involucrar a alrededor de 10 façoneros adicionales.
La empresa ahora analiza la contrapropuesta que le llegó ayer.
En el mejor de los casos, quedarán trabajando unos 40 de los 70 productores que estában vinculados.
Según fuentes vinculadas a Granja Tres Arroyos, los motivos que esta tiene para activar el reordenamiento productivo son básicamente tres: dificultades para colocar la producción en los distintos mercados a precios competitivos; atraso en el pago de las exportaciones realizadas a Venezuela, y el mayor peso de la tributación tras los cambios decididos por el gobierno.
Granja Tres Arroyos redujo 20% su personal, con la cancelación del vínculo de empleados que no habían cumplido tres meses de trabajo y el envío de otros ya contratados al seguro de paro.
Gustavo Clavijo, presidente de la Asociación de Façoneros de Pollos Unidos (AFPU) y uno de los productores que trabajan con Granja Tres Arroyos, puntualizó que en toda esta gestión la asociación no intervino, pues no le fue solicitado por la empresa ni se recibieron pedidos al respecto por parte de los socios.
Desde su rol de façonero, opinó que se ha comprendido la situación "por la que atraviesa la empresa y decidimos dar una señal, aceptar esa rebaja del 10% que obviamente nos complica, pero quisimos dar una señal a todo el mundo; ya habrá otro momento en el que el panorama cambie y el precio se recupere".
"La otra señal que quisimos dar es renunciar a parte del incremento productivo para poder salvar a otros façoneros", agregó.
Otro aspecto que pidió que quedara claro es que "los nombres de los 31 productores y los de otros que puedan seguir vinculados es una decisión exclusiva de la empresa".
La empresa decidió quiénes siguen vinculados en función del volumen y la calidad de su producción, su eficiencia en general, y factores como la distancia entre sus galpones y el complejo industrial ubicado en Cno. Melilla, Montevideo rural.
Gustavo Clavijo, tras destacar las dos señales que los façoneros están dando al aceptar la rebaja en el pago y propiciar que quede por el camino la menor cantidad posible de productores al renunciar a parte de su productividad, remarcó que "todo eso para esto es un sacrificio muy grande". Aún así, dijo que buscarán "poner el hombro una vez más; ahora esperamos que otros actores, como el gobierno, los ministerios de Ganadería y Economía, tengan una actitud concreta de darle una mano al sector".
Granja Tres Arroyos estaba trabajando con 70 façoneros y seleccionó a 31 –los más eficientes en la gestión, a su criterio– y les propuso activar una rebaja de un 10% en el pago, pero a la vez incrementar su actividad productiva para ayudarlos.
Los productores, reunidos esta semana, aceptaron la rebaja, pero con relación al segundo punto decidieron elevar una contrapropuesta a la empresa avícola.
Esta consiste en que renuncian a parte del incremento productivo que se les propuso para destinar eso a que el número de façoneros desvinculados de esta cadena agroindustrial sea menor al originalmente previsto.
Se pretende que alrededor de 10 de los 39 que iban a quedar sin vínculo puedan mantenerlo.
Los 31 elegidos por Granja Tres Arroyos para seguir activos en principio iban a ascender a un volumen productivo de 5,5 crías al año, pero propusieron renunciar a media cría cada uno y destinar eso a otros façoneros que en principio habían quedado de lado.
Renunciar a media crianza por año implica un espacio productivo de 20.000 m2 de galpón, equivalente a 1 millón de pollos por año, volumen productivo que podría involucrar a alrededor de 10 façoneros adicionales.
La empresa ahora analiza la contrapropuesta que le llegó ayer.
En el mejor de los casos, quedarán trabajando unos 40 de los 70 productores que estában vinculados.
Según fuentes vinculadas a Granja Tres Arroyos, los motivos que esta tiene para activar el reordenamiento productivo son básicamente tres: dificultades para colocar la producción en los distintos mercados a precios competitivos; atraso en el pago de las exportaciones realizadas a Venezuela, y el mayor peso de la tributación tras los cambios decididos por el gobierno.
Granja Tres Arroyos redujo 20% su personal, con la cancelación del vínculo de empleados que no habían cumplido tres meses de trabajo y el envío de otros ya contratados al seguro de paro.
Gustavo Clavijo, presidente de la Asociación de Façoneros de Pollos Unidos (AFPU) y uno de los productores que trabajan con Granja Tres Arroyos, puntualizó que en toda esta gestión la asociación no intervino, pues no le fue solicitado por la empresa ni se recibieron pedidos al respecto por parte de los socios.
Desde su rol de façonero, opinó que se ha comprendido la situación "por la que atraviesa la empresa y decidimos dar una señal, aceptar esa rebaja del 10% que obviamente nos complica, pero quisimos dar una señal a todo el mundo; ya habrá otro momento en el que el panorama cambie y el precio se recupere".
"La otra señal que quisimos dar es renunciar a parte del incremento productivo para poder salvar a otros façoneros", agregó.
Otro aspecto que pidió que quedara claro es que "los nombres de los 31 productores y los de otros que puedan seguir vinculados es una decisión exclusiva de la empresa".
La empresa decidió quiénes siguen vinculados en función del volumen y la calidad de su producción, su eficiencia en general, y factores como la distancia entre sus galpones y el complejo industrial ubicado en Cno. Melilla, Montevideo rural.
A la espera de las señales del gobierno
Gustavo Clavijo, tras destacar las dos señales que los façoneros están dando al aceptar la rebaja en el pago y propiciar que quede por el camino la menor cantidad posible de productores al renunciar a parte de su productividad, remarcó que "todo eso para esto es un sacrificio muy grande". Aún así, dijo que buscarán "poner el hombro una vez más; ahora esperamos que otros actores, como el gobierno, los ministerios de Ganadería y Economía, tengan una actitud concreta de darle una mano al sector".
