Funcionarios judiciales harán paro el mismo día que comienza el nuevo CPP

Los 3.600 trabajadores reclaman al Estado que se les pague todo lo adeudado en materia salarial desde 2010, una cifra estimada en US$ 70 millones, cuando la ley de Presupuesto de ese año resolvió un incremento en los sueldos de los ministros de la Suprema Corte de Justicia, pero no el de los trabajadores. Ellos aducen que les corresponde también un aumento, por efecto de "enganche" en la cadena salarial establecido en la asignación presupuestal anterior.

Los funcionarios ganaron un juicio contra el Estado en 2016 por este asunto, en donde la Justicia dictaminó el pago de la deuda de US$ 50 millones por concepto de aumento salarial del 26%, que por intereses e inflación hoy asciende a 70 millones, dijo al El Observador Richard Ascurrein, secretario general del gremio.

En setiembre de 2016 se hizo la comunicación para que se efectuara el pago, pero el Ministerio de Economía se amparó en el artículo 733 de la ley de Presupuesto por el que se determina que el Poder Ejecutivo puede aplazar este pago al no disponer de fondos, explicó. Y ahora, por el artículo 15 de la Rendición de Cuentas, que establece posponer todo pago superior a US$ 10 millones por juicios que el Estado pierda, los trabajadores deberán esperar que el Poder Legislativo apruebe ese gasto el año que viene. "Se sigue supeditando el cumplimiento de una sentencia a la voluntad de un poder del Estado", reclamó Ascurrein.

En la asamblea del primer día de noviembre, que comenzará a las 14 horas, se votará la moción por la que 200 funcionarios convocaron de urgencia esa instancia: si extender el paro por tiempo indeterminado, comprometiendo seriamente la puesta en marcha del nuevo CPP. "Desde hace días estábamos previendo movilizarnos en noviembre", aseguró el sindicalista.

A la AFJU también le preocupa la pérdida presupuestal que ha sufrido el Poder judicial en los últimos ocho años, una reducción que estiman en casi un 1%, pasando del 1,2% que tenía ese poder en 2009, al 0,3% actual. "Eso obligó a que no se llenaran muchas vacantes, para cubrir otros gastos, como los de funcionamiento, recargando así la tarea de los trabajadores", señaló su secretario general.