Gobierno de Ecuador decretó el estado de sitio tras el atentado con explosivos que dejó 5 muertos y 26 heridos

"He declarado en estado de excepción debido a los sucesos delictivos dados en las últimas horas", informó Lasso vía Twitter. El mandatario, que mañana viajará a la ciudad estadounidense de Houston para someterse a una cirugía menor, señaló que “se dispondrá de toda la fuerza pública para restablecer el control de la ciudad”.

“No permitiremos que el crimen organizado pretenda manejar al país", agregó el mandatario. Horas antes, el ministro del Interior, Patricio Carrillo, había afirmado que los “mercenarios del crimen organizado, que han narcotizado la economía durante mucho tiempo, ahora atacan con explosivos”. Carrillo, que junto con el ministro de Gobierno, Francisco Jiménez, firmó el decreto presidencial, calificó como “una declaración de guerra al Estado" el accionar del narcotráfico.

La explosión, que se produjo durante la madrugada y cuyas causas no habían sido precisadas por las autoridades hasta esta tarde, afectó al menos ocho viviendas y dos autos, que quedaron destruidos, de acuerdo con el Servicio Nacional de Gestión de Riesgos (SNGR). “Una explosión de proporciones", según la definió la Policía. Horas después, la Municipalidad de Guayaquil elevó de 16 a 26 la cantidad de heridos y precisó que 10 de ellos estaban en "estado crítico".

Por su parte, la alcaldesa de Guayaquil, Cynthia Viteri, afirmó que se trató de "un atentado provocado por bandas criminales" y sostuvo que esos grupos “se han convertido en un Estado dentro del Estado". Además, le reclamó a Lasso que "tome las debidas cartas en el asunto", según consignan los diarios locales El Comercio y Expreso. Declaraciones a las que el presidente respondió señalando que Viteri “parece no comprender que el enemigo es el narcoterrorismo que se quiere instalar en la sociedad, y no el gobierno".

Según los testimonios recogidos por El Comercio, inmediatamente antes de la explosión se produjo un tiroteo entre grupos de personas a bordo de motocicletas, alguno de los cuales arrojó una bolsa de arpillera al local de un comercio de comidas. "Allí habrían estado los explosivos que detonaron segundos después", estimó el diario. La Policía, en tanto, informó que la búsqueda de los responsables incluye la revisión de las imágenes de las cámaras de seguridad de la zona, al tiempo que el Ministerio del Interior ofreció una recompensa de US$ 10.000 para quienes puedan suministrar información valiosa.

"O nos unimos para enfrentar al crimen organizado o el precio será aún más alto", advirtió Carrillo ante la ola de criminalidad que atraviesa Ecuador, un país ubicado entre Colombia y Perú, los mayores productores de cocaína del mundo. Los enfrentamientos entre las bandas que pugnan por el control del narcotráfico se han extendido a las cárceles, en las cuales se registrado desde febrero de 2021 siete motines con un saldo de 400 presos asesinados. Además de dejar escenas de terror en las calles con cuerpos decapitados y colgados de los puentes, al estilo de la modalidad utilizada por los carteles narcos de México.

Según la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, Ecuador decomisó en 2020 el 6,5% del total de la cocaína incautada en el mundo, un récord de 210 toneladas el año pasado y 100 toneladas en los últimos seis meses. La tasa de criminalidad, en tanto, se duplicó desde 2020 hasta alcanzar los 14 asesinatos por cada 100.000 personas.