Israel bombardea la Franja de Gaza un día después de su operación militar en Naplusa

El intercambio de fuego se produce un día después de la operación militar israelí en la ciudad palestina de Naplusa, en Cisjordania, que dejó 11 muertos y más de 80 heridos, la más mortífera desde 2005.

En lo que la agencia de noticias AFP calificó como “un guión recurrente”, los habitantes de Gaza escucharon poco antes del amanecer los silbidos de una andanada de entre 6 y 8 cohetes, lanzados en represalia por la muerte de los palestinos de Cisjordania el día anterior.

"Cinco de los cohetes fueron interceptados por el sistema de defensa aérea y un cohete cayó en una zona despoblada", precisó el portavoz del ejército de Tel Aviv.

Las agencias internacionales indicaron que los cohetazos palestinos hicieron sonar las alarmas antiaéreas de las localidades israelíes de Ashkelon, Sderot y la zona que rodea la Franja, pero no produjeron víctimas.

Luego de la réplica de la aviación israelí, columnas de humo se levantaban al norte de Gaza. Voceros israelíes dijeron que el blanco del ataque fue un almacén naval de armas situado junto a una mezquita, un centro médico, una escuela, un hotel y una comisaría de Policía, ya que Hamás "sitúa deliberadamente sus activos (bélicos) en el corazón de zonas civiles".

Gaza está bajo control del movimiento islamista Hamás desde 2007 pero los disparos fueron reivindicados por el grupo palestino Yihad Islámica, que previamente llamó a "las fuerzas de resistencia" a responder "sin titubeo" al "crimen mayor" cometido en la víspera por el ejército israelí en Naplusa.

Ante los acontecimientos del miércoles, el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, lamentó que la situación "en el territorio palestino ocupado" sea "la más explosiva en años".

También la Unión Europea pidió a "todas las partes a actuar para un regreso a la calma y una desescalada de la tensión".

Desde Jordania, por su parte, anunciaron que trabajarán "de manera intensa con todas las partes" para poner fin a la escalada de violencia.

Desde comienzos de año, el conflicto costó la vida de 60 palestinos (entre ellos miembros de grupos armados y civiles, incluidos menores), y de un policía y nueve civiles israelíes (incluidos tres menores), según un recuento de AFP en base a datos oficiales de ambos bandos.

"Nuestra prioridad inmediata debe ser evitar una mayor escalada, reducir las tensiones y restaurar la calma", dijo Guterres.

El miércoles por la tarde una multitud, que incluyó hombres armados, participó en los funerales de nueve de las víctimas de la operación israelí en Naplusa.

Un décimo fallecido fue inhumado en el cercano campo de refugiados palestinos de Balata, mientras que la última víctima, de 66 años, falleció en la noche por la inhalación de gases lacrimógenos, según el ministerio de Salud palestino.

El ejército israelí aseguró haber desplegado su "operación antiterrorista" en la zona autónoma palestina en busca de tres sospechosos implicados en ataques armados y que planificaban ataques para un futuro inmediato, los que “fueron neutralizados".

Durante la operación, que duró casi cuatro horas, los pobladores palestinos lanzaron piedras y artefactos explosivos contra los soldados, indicó el ejército israelí, que precisó que ninguno de ellos había resultado herido.

Al menos 82 personas fueron hospitalizadas por heridas de bala, algunas en estado grave, afirmó el ministerio palestino.

La Yihad Islámica indicó que uno de sus combatientes locales formaba parte de las víctimas. También la Guarida de los Leones, un grupo de combatientes con sede en Naplusa, señaló que seis de los muertos eran miembros de distintas facciones palestinas.

Las fuerzas israelíes realizan desde hace casi un año operaciones presentadas como "antiterroristas" en búsqueda de "sospechosos" en el norte de Cisjordania, particularmente en las ciudades de Yenín y Naplusa, bastiones de grupos armados.

En Twitter, el ministro palestino de Asuntos Civiles, Husein al Sheikh, denunció un "acto criminal premeditado y bárbaro" y pidió a la comunidad internacional "intervenir inmediatamente".