Terminal Cuenca del Plata (TCP) presentó este viernes el proyecto final para su ampliación dentro del puerto de Montevideo. La inversión superará los US$ 600 millones y generará 1.500 puestos de empleo directo.
El proyecto forma parte del acuerdo que el gobierno firmó con la multinacional belga Katoen Natie (accionista mayoritario de TCP) en febrero de 2021 para la extensión de la concesión de la terminal hasta 2081.
En la presentación estuvieron presentes el presidente Luis Lacalle Pou, el ministro de Transporte, José Luis Falero, y el presidente de la Administración Nacional de Puertos (ANP), Juan Curbelo, entre otras autoridades. También llegaron desde Bélgica el CEO de Katoen Natie, Fernand Huts, y el presidente de Terminal Cuenca del Plata, Karl Huts.
El primero en tomar la palabra fue el presidente de TCP. Destacó que cuando las obras finalicen se van a poder operar en la terminal 3 millones de contenedores al año. “Para ponerlo en perspectiva, es la capacidad entera que maneja el puerto de Buenos Aires hoy en día”, enfatizó.
Foto: Leonardo Carreño.
La maqueta de la terminal ampliada
Cuando la terminal trabaje con esa capacidad ya habrá generado 1,4 kilómetros de muelle y una playa de contenedores de 60 hectáreas. Esas dos obras le permitirán recibir cuatro buques portacontenedores de manera simultánea. Karl Huts también resaltó en su discurso que se crearán 1.500 puestos de empleo directo, además de los indirectos.
“Montevideo está listo para defender su posición de puerto más eficiente de la región y listo para conquistar el siglo XXI”, afirmó.
Foto: Leonardo Carreño.
Karl Huts, presidente de TCP
El momento llamativo de la inauguración lo protagonizó Emanuelle, la hija del presidente de Terminal Cuenca del Plata. “Estimado señor presidente (dirigiéndose a Lacalle Pou), estimados todos. Hace 11 años mis padres vinieron a Uruguay y de su amor por el país nacimos mi hermana y yo. Estoy orgullosa de tener dos patrias y ser una belga oriental”, dijo y desató los aplausos de los cientos de personas presentes.
Luego fue el turno de Fernand Huts, quien recordó que las primeras inversiones de su empresa en Uruguay comenzaron en 1997 y luego continuaron. “Celebramos 20 años de Terminal Cuenca del Plata y 25 años de inversiones en Uruguay”, dijo.
Indicó que la inyección actual de capital dentro del puerto de Montevideo es la inversión más significativa en todo ese período. “Estamos convencidos que esta nueva inversión será la piedra fundamental para impulsar el crecimiento de Uruguay”, sostuvo el CEO de Katoen Natie.
Foto: Leonardo Carreño.
Fernand Huts, CEO de Katoen Natie
Por la delegación gubernamental el primero en hablar fue el ministro Falero, que calificó a la obra como “un hito”. Expuso que "ha quedado claro" el "rumbo que el gobierno tenía para el puerto de Montevideo", con la actividad comercial y también con "la apertura al mundo" de los productos uruguayos.
"Acá hay un rumbo claro: el desarrollo de nuestro país y utilizar el puerto y las bondades naturales para el crecimiento", enfatizó el ministro de Transporte.
Sostuvo que el gobierno tiene "el compromiso" de "mostrarle y demostrar" a los inversores privados que miran a Uruguay "como una opción de oportunidad".
Finalmente, agradeció a Katoen Natie por "confiar en el Estado" uruguayo y agregó que fue "un proceso que llevó su tiempo, pero que valió la pena".
Foto: Leonardo Carreño.
Ministro de Transporte, José Luis Falero
El último orador fue el presidente Lacalle Pou, quien comenzó recordando cómo conoció a la familia Huts, cuando él era senador por el Partido Nacional. "Dos o tres años antes de la elección sucedió algo que nunca es bueno, que es cuando se cambia cooperación por conflicto", relató.
El mandatario señaló que "tanto" se había agravado el conflicto en el puerto que una "empresa familiar" como Katoen Natie pensaba en "vender". "No es el día para recordar cosas que no eran lindas. Pero además estaba la posibilidad de un juicio, eso es lo que estaba pasando", afirmó Lacalle Pou en su discurso.
"Yo era senador y como siempre me interesaron los temas logísticos y portuarios me fui a camino El Andaluz y le pedí una reunión a toda la familia Huts. Porque creía que estaba la que manda", ironizó el mandatario en relación a Karine Huts, esposa de Fernand Huts.
Foto: Leonardo Carreño.
Presidente Lacalle Pou
El presidente recordó que la reunión "se hizo larga" y después de comer pidió para ir al baño. "Entré por la cocina y estaba la señora Huts y miro por la ventana y veo unas cañas y unos tomates. Y le pregunto: ¿eso qué es?", contó Lacalle Pou. Fue entonces cuando Karine Huts le contó que estaba plantando tomates.
"Y yo por dentro dije: 'Estos belgas se quedan. Porque si están plantando, es que siguen'", apuntó el presidente, quien agregó que "lo que hacía falta" era ponerse "de acuerdo".
Las obras
El plan de obras que fue presentado este viernes incluye la construcción de un nuevo muelle al oeste del área de concesión para recibir buques a 14 metros de profundidad. También prevé la construcción, pavimentación, iluminación, canalización y obras pluviales de una playa de contenedores y la remodelación de la escollera Sarandí.
Luego de un proceso competitivo Katoen Natie eligió para hacerse cargo de las obras a un grupo compuesto por las constructoras Jan de Nul (Bélgica), Mota-Engil (Portugal) y Stiler (Uruguay).
La inversión primaria estimada era de US$ 455 millones.
Uno de los aspectos que motivó que fuera mayor es la incorporación de un sistema de “cold ironing”, que brinda energía a los buques portacontenedores y elimina la contaminación por la combustión permanente de los motores. El sistema otorga energía al barco y a todo el sistema de refrigeración de los contenedores con los motores apagados.
Cuando las obras estén culminadas permitirá a la terminal movilizar una mayor cantidad de contenedores de exportación, importación y tránsitos de mercadería. Para eso, además del contrato de extensión de la concesión de la terminal, también se aprobó un decreto con un nuevo reglamento para el atraque de buques en el puerto de Montevideo. Uno de los artículos de ese decreto establece que la Administración Nacional de Puertos (ANP) deberá “priorizar el atraque de buques y barcazas portacontenedores en la terminal especializada (TCP) y solo podrá decretar los mismos en los muelles multipropósito (áreas públicas del puerto) en caso de que la terminal se encuentre ocupada durante el período de 24 horas”.