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La batería de medidas que permite que el Mercado Modelo siga funcionando
En un dispositivo coordinado por la Unidad Agroalimentaria Metropolitana (UAM) y el Mercado Modelo, está vigente una “batería de medidas” que tiene como objetivo mantener a pleno el funcionamiento diario de dicho centro de comercialización hortifrutícola, el mayor del país, destacó a El Observador José Saavedra, presidente de la UAM.
“El objetivo es promover la mayor conciencia sobre lo que todos debemos hacer para que el mercado no cierre, para que mantenga sus puertas abiertas y que todo el mundo pueda ir a vender y a comprar y así se sostenga el funcionamiento de la cadena con absoluta normalidad”, afirmó.
En ese marco, la UAM y el Mercado Modelo difundieron un video institucional en el que se resume el conjunto de manejos y actitudes que se han adoptado para que, en el escenario de emergencia sanitaria decretado por el gobierno dada la propagación local del covid-19 (coronavirus), en dicho mercado hortifrutícola se puedan seguir desarrollando los diferentes servicios, con el correspondiente mantenimiento de muchos empleos y a la vez el normal abasto de alimentos clave a la población.
El mensaje
Saavedra dijo que “esto lo hemos tomado con la mayor seriedad, como corresponde, por iniciativa nuestra pero además siguiendo los pedidos que nos han hecho por ejemplo la Intendencia de Montevideo y el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca. Es fundamental que ese mercado, por el cual cada día pasan de 3.500 a 4.000 personas, siga funcionando”.
Para eso, indicó, se apostó a concientizar sobre las medidas que son necesarias para minimizar los riesgos de contagio, “que es lo más importante”.
Eso implicó afectar a algunas “zonas de confort y cambiar algunas costumbres”, indicó, por ejemplo la forma de saludarse, recurrir al constante lavado de manos, realizar desinfecciones generales (dos veces por día en todo el Mercado Modelo), aplicar controles de temperatura aleatorios a los changadores y al resto de las personas que ingresan, también cuando un vehículo ingresa se le coloca un producto en las ruedas, al igual que en los carros que transportan mercadería.
Saavedra aludió, incluso, a cambios logísticos que establecieron eliminar una descarga intermedia que se hacía entre las horas 10 y 11, pasándola para la tarde, separando las labores de recepción y descarga de mercadería de las que se realizan para comercializar, Entre ambos momentos, con el mercado cerrado, se realiza una desinfección incluso dentro de los espacios de comercialización.
Finalmente, explicó sobre la existencia de “equipos de contingencia”, es decir personal que está en una segunda línea a la orden para proceder con el cumplimiento de la gestión completa en caso que suceda algún imprevisto y permitir así que el mercado siga activo.
Miles de empleos
