La Roche-Posay acercó de forma gratuita atención dermatológica a más de 200 personas, reforzando así su compromiso con la prevención del cáncer de piel

La primera activación de la temporada llevada adelante por La Roche-Posay, tuvo lugar el sábado 4 de diciembre en el Parque Rodó. Se realizó una jornada de chequeo de lunares en coordinación con la Cátedra de Dermatología de la Udelar y el Hospital de Clínicas, con consultas gratuitas de la mano de 19 médicos y dermatólogos. Tomaron parte cientos de personas.

“El evento estuvo enmarcado en la acción concreta de las revisión de lunares, pero buscando el impacto para generar la concientización de la importancia de su revisión y de hacerlo una vez al año con el dermatólogo”, comentó Gimena Pedrosa, representante de Relaciones Médicas de La Roche-Posay. Recordó las estadísticas mundiales del cáncer de piel, “muy frecuente y con una incidencia enorme”. “En Uruguay, lideramos en América Latina”, acotó.

El médico dermatólogo y profesor adjunto de la Cátedra de Dermatología de la Facultad de Medicina de la Udelar, Julio Magliano, confirmó esa tendencia de aumento en el país, citando cifras de la Comisión Honoraria de Lucha contra el Cáncer, cuyo último período de análisis abarca los años 2013-2017. En ese quinquenio hubo 15.980 casos de cáncer, con un promedio de 3.200 por año.

“Este registro se lleva a cabo a través de anatomías patológicas, es decir, cuando pasa  por un anatomopatólogo. Sucede que muchas veces hay un diagnóstico clínico –que no lleva tratamiento anatomopatológico–, por lo que se habla de un subregistro y los casos podrían ser más”, explicó Magliano. Esos casos de cáncer de piel incluyen carcinomas y melanomas.

“El melanoma es el más complicado y aparece en jóvenes, produce metástasis y muertes. Se calcula que mueren dos uruguayos por semana de cáncer de piel”, continuó. “Ahora, todos son curables. Por eso estas campañas de prevención para tratar de concientizar; minimizar los riesgos producto de la exposición al sol, en primer lugar, y luego control para hacer el diagnóstico precoz. Si lo agarrás recién iniciado, las tasas de curación son muchos mejores”. El 90% del cáncer de piel, si se detecta a tiempo, se puede tratar y curar, y no deja secuelas.

Autoevaluación

La campaña #TuPielHabla también procura fomentar la autorevisión, como observarse las propias lesiones –las de la espalda, por ejemplo-, y no pasar por alto y consultar al dermatólogo sin demora. Resulta clave reforzar el chequeo anual de lunares –no lleva más de 15  minutos una consulta, es sencilla y nada invasiva– y esa autoevaluación siguiendo las indicaciones del “método ABCDE”, para aprender a revisar tus lunares.

“Hay señales, determinadas características que pueden llamar la atención: bordes difusos en lesiones, que cambian de color de manera repentina, etc. O no estaba y aparece de golpe la lesión. Pica o genera una costra. El diámetro es otro indicador para llevarte a hacer una revisión”, dijo Pedrosa.

Magliano, de su lado, profundizó acerca del método ABCDE: “Es una nemotecnia que ayuda a los pacientes a detectar posibles lesiones sospechosas de melanoma y de esa manera tratar de llegar al diagnóstico temprano. La A es de asimetría, si se divide en 2 mitades una lesión pigmentada ambas mitades deben ser simétricas si son asimétricas es de sospechar. La B es de bordes que lo normal es que sea de bordes regulares si son irregulares debe llamar la atención. La C es de color, debe hacer sospechar aquellas lesiones con varios colores, varios tonos de marrón, rojo, blanco, azulado etc. La D de diámetro, un diámetro mayor a la parte de atrás de un lápiz (6 mm) debe hacernos estar alerta. La E de evolución, debemos prestar atención en una lesión que crece y cambia en corto tiempo”.

La prevención también resulta fundamental: se recomienda respetar las medidas de protección solar, como utilizar diariamente protección solar UVA/UVB y adoptar conductas inteligentes con respecto al sol, como colocarse a la sombra –no exponerse al sol entre las 10 y 16 horas–, usar sombrero de ala ancha que dé sombra en la cara y las orejas, lentes de sol con filtro para las radiaciones, y ropa oscura y de trama apretada.

En jóvenes

Las acciones de La Roche-Posay también se enmarcan en la semana de concientización de la lucha contra el cáncer de piel. “Y aparece en personas jóvenes. Lo que más condiciona es el tipo de exposición al sol que tenemos entre los 0 y 18 años. Ese sol va a determinar el daño o no en la vida adulta”, explicó Pedrosa.

Cinco o más quemaduras solares antes de los 18 años duplican el riesgo de melanoma; en tanto, las personas con melanoma que son detectados tempranamente tienen una sobrevida muy alta (98% a los 5 años).

El cáncer de piel se da a causa del crecimiento anormal y descontrolado de las células de la piel producto del daño irreparable de su ADN; como resultado se genera la proliferación descontrolada de estas células con la aparición del tumor maligno.

Existen una serie de factores que aumentan el riesgo de melanoma; de piel clara con pecas, pelirrojos o rubios, con ojos claros; que al exponerse al sol quedan rojos y no se broncean; con más de 50 lunares irregulares o grandes desde el nacimiento; con antecedentes suyos o en su familia de cáncer de piel; inmunodeprimidas como las personas trasplantadas o con VIH; que trabajan o hacen deportes al sol; con enfermedad de Parkinson; o que utilizaron camas solares.

“Está demostrado que la dos principales  causas de cáncer de piel son: la exposición a los rayos ultravioletas del sol y las camas solares”, subraya un reporte de La Rocha-Posay en relación a esta enfermedad. “La buena noticia es: si el cáncer de piel se detecta temprano puede ser tratado, eliminado y en la mayoría de las veces curado”, añade.