“Vos me dirás que estoy loco, pero yo creo que voy a ser presidente. Y tengo que empezar a prepararme desde ahora”. Es una calurosa noche del jueves 8 de noviembre de 2012 y el que habla es el hoy presidente Luis Lacalle Pou; a su lado está sentado su amigo y ahora secretario de la Presidencia, Alvaro Delgado y, enfrente, este cronista. La charla transcurre en la pizzería Chez Piñeiro a donde Lacalle Pou me invitó a comer unas muzzarellas luego de que participara -él como exponente, yo como periodista- de una charla ante jóvenes militantes en un apartamento de Punta Carretas.