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Las claves de la histórica actuación del remo uruguayo en los Juegos Panamericanos
Uruguay cerró el miércoles la mejor actuación de su historia en remo en Juegos Panamericanos al cosechar dos medallas de oro, dos de plata y una de bronce para terminar en el tercer lugar del medallero de ese deporte en Santiago 2023 detrás de Estados Unidos y Chile.
En varones, Uruguay dominó el medallero al ser el único país que ganó dos oros.
Uruguay fue medalla de oro en el cuádruple par con Bruno Cetraro, Felipe Kluver, Marcos Sarraute y Leandro Salvagno y también en el doble par abierto con Martín Zócalo y Eric Seawright.
Las platas se ganaron en el dos remos largos sin timonel con Leandro Rodas y Esteban Sosa y en el ocho remos largos con timonel con Bruno Cetraro, Felipe Kluver, Leandro Rodas, Mauricio López, Marcos Sarraute, Eric Seawright, Leandro Salvagno, Martín Zócalo y Romina Cetraro como timonel.
Además, se ganó un bronce en el cuatro remos largos sin timonel con Leandro Salvagno, Marcos Sarraute, Martín Zócalo y Eric Seawright.
Salvagno, Sarraute, Zócalo y Seawright ganaron tres medallas igualando la gesta del ciclista Alberto Camilo Velázquez de México 1955 y de Ana María Norbis en Winnipeg 1967.
El remo, que concurrió con la delegación más grande de su historia (17) superó las cuatro medallas que había logrado en Chicago 1959.
Además, igualó al ciclismo que ganó cinco en México 1955, aunque ninguna de oro.
"Lo más difícil fue el primer día porque había que empezar bien para que se motivaran. Luego se fue dando. Siempre pensé que teníamos posibilidades de ganar varias medallas, pero nunca lo dije porque no me gusta dar pronósticos", contó el entrenador Osvaldo Borchi a Referí.
"Fue una pena que se lesionara Felipe (Kluver) en el ocho porque si no se lesionaba, agarrábamos el oro", agregó.
Borchi analizó cada una de las medallas ganadas:
"El dos sin remos largos sin timonel (Leandro Rodas-Esteban Sosa) fue un gran bote, hizo un trabajo espectacular, sorprendieron a todos. Fue un bote que debutó ya que nunca había corrido antes junto. Leandro es un remero súper importante y Sosa tiene 16 años no parecía tener esa edad, tuvo gran consistencia, gran energía y profesionalidad. Fuimos probando diferentes tripulaciones en ese bote y a veces las cosas no funcionan hasta que Esteban se subió y funcionó. El remo es muy dinámico. A veces podés estar un año con un bote y no funciona. Y si no funciona, no funciona. Hubo mucha cohesión de equipo, Leandro es muy inteligente, tiene experiencia en ese bote y Sosa le dio un gran ímpetu".
"Con el cuádruple queríamos sacarnos la espina de 2019 donde perdimos el oro por un error, no por doping. Fue una pena que nos la hayan sacado cuando no hubo doping sino un error. Con estas medallas con Uruguay llegué a 20 medallas de oro, contando las que gané con Argentina y México. Cumplí años el 14 de octubre y esto fue mi mejor regalo. Valió la pena todo el sacrificio que pasamos", analizó.
"El 8 remos largos con timonel ganó una plata con sabor a oro. Hicimos 1.200 metros del trayecto con Felipe lesionado, aguantando el dolor para no cometer un error. Lo bajaron del bote los guardavidas. Se bajó del podio y lo llevaron en ambulancia. La gente decía que en el podio estaba emocionado, pero estaba llorando del dolor. Ese es el umbral del dolor y la calidad humana para jugársela por los demás. En el remo, el 8 es el bote que representa el team work, el trabajo en equipo".
Sobre el cuatro remos largos sin timonel, Borchi expresó: "Nos faltaron elementos para entrenar en la preparación. Leandro vivo en España y hubo poco tiempo para entrenar, no tuvimos los botes adecuados y a pesar de eso ganamos la medalla de bronce. Parece que por ser de bronce y no de oro no sirve, pero la gente se mata por ganar una medalla panamericana. Nos mal acostumbramos".
Uruguay, desposeído de su medalla de oro en el cuádruple par de Lima 2003, no ganaba una medalla en remo desde Santo Domingo 2003, cuando fue plata en el cuádruple par con Ruben Scarpatti, Rodolfo Collazo, Andrés Medina y Leandro Salvagno.
La última medalla llegó el jueves con Martín Zócalo y Eric Seawright en el doble par abierto. Y fue de oro. "Fue una excelente", analizó Borchi.
La dupla había sido cuarto en el Mundial sub 23 de Plovdiv en julio con escaso tiempo remando juntos.
"Corrieron en forma inteligente, vinieron de atrás, dominaron la regate en los últimos 500 metros, le ganaron a Cuba que estaba fuerte por haber ganado el ocho y fue una revancha con ellos. Fue una gran regata".
"Nos tocó ser mejores en dos botes donde le ganamos a todos. Poder correr una final es histórico y es el reflejo del trabajo del año. En realidad trabajamos para esto desde hace ocho años, en Sudamericanos, en Juegos Odesur. Acá teníamos que coronar todo lo que habíamos hecho en los Odesur pero contra toda América. Ganarle al ocho de Estados Unidos que son espectaculares tiene otro valor. Es un bote que en Estados Unidos es muy importante, tiene mucha tradición, gran nivel y que es muy competitivo a nivel universitario. Nosotros salimos a remar cuatro veces en ese bote y les ganamos".
Sobre la actuación de las mujeres, donde Uruguay solo tenía el antecedente de la participación de Sabrina Díaz en Lima 2019 y donde se clasificaron a siete, Borchi afirmó: "Están en un gran proceso. El nivel de los hombres que tenemos es tan alto que el de las mujeres es bajo, pero han crecido y es constante el crecimiento. Haber llegado a una final A (Nicole Yarsón y Tatiana Seijas, en doble par peso ligero) y haber ganado una final B (Cloe Callorda en single) es súper valorable".
El camino a los Juegos Olímpicos de París 2024
Uruguay tiene como próxima gran cita el Preolímpico de Río de Janeiro a disputarse el 17 de marzo.
El torneo clasificará a los Juegos Olímpicos de París 2024 en dos botes: el single y el doble par peso ligero.
Para Tokyo 2020, en estos clasificatorios regionales cada país podía clasificar un solo bote. Uruguay logró la plaza con Bruno Cetraro y Felipe Kluver en el doble par peso ligero, que ganó la regata clasificatoria, y a Martín Zócalo que fue tercero en single. Como existía la limitante del país, solo pudo ir el doble par ligero que hizo historia y fue sexto en los Juegos Olímpicos.
Ahora habrá dos cupos clasificatorios para el doble par peso ligero (y no los tres tradicionales) y cinco para el single (antes eran seis).
El doble par peso ligero de Tokyo se separó en febrero de este año. Cetraro se dedicó al single y Kluver pasó a correr con Mauricio López.
Cetraro perdió este miércoles por siete centésimas la medalla de bronce en Santiago.
Kluver y López fueron terceros en su serie, no pasaron a la final y tuvieron que ir a repechaje, instancia que no disputaron para poder estar frescos para el cuádruple par (Kluver) y el ocho (los dos).
¿Quiénes compondrán esos botes? "Ahora hay que barajar otra vez y empezar a entrenar individualmente y todos juntos. Ya veremos. Ahora es entrenar, subirse al single e ir para adelante. Falta mucho tiempo para decidir quién va a correr. Primero hay que disfrutar esto y luego ponerse a entrenar".
Esa no será la única instancia clasificatoria. Del 19 al 21 de mayo en Lucerna, está pactado un Mundial de repechaje para todos aquellos países no clasificados donde cada regata otorgará una solo plaza para París 2024.
Los botes olímpicos son, además del single y el doble par peso ligero, el dos remos largos sin timonel, el cuatro remos largos sin timonel, el ocho remos largos con timonel, el doble par abierto y el cuádruple par abierto. Son los mismos que se disputaron en Tokyo 2020.
"Creo que los que menos importancia le damos a los resultados somos nosotros. Acá nos felicitaron de otros países, nos preguntaron cuál es nuestra fórmula, pero la fórmula es muy sencilla: trabajar, meterse cada uno en su mundo y no creerse el dueño de la verdad. Es como se hacen las cosas en equipo y así seguiremos trabajando, tengo un grupo espectacular, sin atleta no existís como entrenador, necesitás gente que se la juegue como se la jugó esta gente sin miedo a nada, sabiendo que se entrenó para eso. Acá no hay milagros, hay entrenamiento. Y el entrenamiento es duro. De mí dirán que soy un hijo de puta por cómo los hago entrenar, pero prefiero que digan que soy un hijo de puta y no buena gente porque sino me parten la cabeza a fierrazos", concluyó Borchi con su particular estilo verborrágico.
